Quien sí cumplió con su deuda fue el embajador de Japón en México, Noriteru Fukushima, que regaló guajolotas en el Día de la Candelaria
Foto: Captura video | La primera torta de tamal la regaló a una señora del personal de limpieza de la CDMX  

Llegó el 2 de febrero, Día de la Candelaria, y a quien le salió el “Niño Dios” de la rosca de Reyes tendrá que pagar su deuda con tamales.

Quien sí cumplió con su deuda fue el embajador de Japón en México, Noriteru Fukushima, que regaló tamales a trabajadores de limpia y vendedores de la Ciudad de México.

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El mismo embajador reconoció que le salieron dos muñequitos en la rosca del pasado 6 de enero, por lo que debía cumplir con su promesa de “poner los tamales”. Pero Fukushima no repartió los tradicionales tamales en su hoja, sino que pidió varias “guajolotas”.

En un video que posteó en sus redes sociales, se aprecia al embajador portando un traje gris yendo a un puesto de tamales para comprar las tortas. Con ayuda de un pequeño huacal, el embajador recorrió Paseo de la Reforma para repartir las “guajolotas” a personas que se encontraban cerca de la sede Diplomática.

La primera torta de tamal la regaló a una señora del personal de limpieza de la CDMX, quien en ese momento se encontraba barriendo.

“Soy embajador de Japón que trabajo aquí. Me tocó niño y quiero regalar tamal… ¿sí puede recibir?”, mencionó Noriteru Fukushima a la trabajadora, quien tras tomar la torta le agradeció y le dijo que esperaba que le tocara nuevamente el niño de la rosca.

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El embajador japonés continuó repartiendo las “guajolotas” a otros trabajadores y vendedores, y quienes recibieron la comida le agradecieron al diplomático.

“Gracias por recibir estos tamales y ojalá que tengan buen provecho este Día de la Candelaria”, agregó en el video.

EAM