En el Grupo C del Mundial Femenino, la lengua dominante es el español. Las selecciones de España y Costa Rica se encargan de poner el sabor latino al grupo que cuenta también con Japón y Zambia.
Las dos selecciones hispanohablantes arrastran sendas polémicas al llegar al máximo torneo del fútbol femenino, aunque las semejanzas acaban ahí.
España, 6ª en el ranking FIFA, es una potencia en el balompié femenino y aspirante al título, mientras Costa Rica (36ª en el ranking), en su segundo Mundial, tiene aspiraciones más modestas.
El grupo lo completan Japón -ganadoras del Mundial de 2011- y Zambia, debutantes en el torneo.
En el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, la selección española quiere “llegar lo más lejos posible, hacer historia”, declaró su entrenador Jorge Vilda, quien insistió en que “vamos a pelear por estar en lo más alto”.
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