La OTT (over the top) más deseada en los servicios de streaming, Disney Plus, llegó a México con una primera gran alianza: con Izzi, la empresa de telecomunicaciones de Grupo Televisa y que dirige Salvi Folch. Se puede decir que la plataforma que agrega los programas, series y películas de Disney, Pixar, Marvel, StarWars y National Geographic marca un antes y un después para los sistemas de televisión restringida, ya sea por cable o satélite.

El éxito que inicialmente abrieron otros OTT, como Netflix, Roku y Prime Video, mostraron que los contenidos de audiovisuales de calidad, a disposición de los usuarios en dispositivos móviles y sin ataduras de horario, cambiarían la forma del consumo digital. Las televisoras de sistema abierto entendieron ese cambio y en México, Televisa y TV Azteca construyeron sus propias redes de fibra óptica, ya no para competir en telefonía o televisión por cable, sino para desplegar sus propios contenidos y en especial a las de sus aliados con programación atractiva. También Telmex reconvirtió parte de su red y sus contenidos para lanzar Claro Video con contenidos inicialmente mexicanos y latinoamericanos y luego a los grandes OTT.

El Caso de Disney Plus es especial. Congrega a los principales generadores de contenidos y construcción de “universos” que atraen espectadores y generan modas y estilos de vida que van más allá de la pantalla: se trata de los productos culturales con el mayor alcance global que existe actualmente y que por sí mismos superan la oferta contenida en los sistemas tradicionales de cable, sin las ataduras de horarios y equipos fijos.

Izzi es la primera plataforma digital que incorpora a Disney Plus, y lo tiene como un elemento clave para mantener y ampliar su base de suscriptores. Con precio especial para sus actuales suscriptores en sus combos más altos (cerca de siete dólares al mes) o el equivalente a 55 dólares al mes por todos los servicios Izzi (voz, datos, internet) y la nueva aplicación Android TV sobre Google, con lo que también se marca un punto de quiebre para acceso a los sistema de nube para distribución y almacenamiento de datos.

¿Pendientes en SFP?

Desde inicios de octubre, el equipo de Thalía Lagunas en la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda prepara la contratación consolidada del servicio integral de limpieza para el próximo año, pero en últimas fechas se han encendido diversas alertas relacionadas con las proveedoras gubernamentales. Entre ellas está Tecnolimpieza Delta, que fue inhabilitada durante dos años por el Órgano Interno de Control (OIC) de la FGR, el pasado 16 de octubre.

Sin embargo, la empresa también es parte de una denuncia presentada ante el OIC de la Secretaría de Salud, cuyo titular es Ángel Rodríguez Alba, en la que el extrabajador de una de las supuestas implicadas, relata que diversas compañías se habrían coordinado para escalonar precios en el estudio de mercado que emprendió la dependencia de Jorge Alcocer, y que Grupo Relissa, relacionada en el sector con José Juan Reyes, se quedará con un contrato por más de 90 millones de pesos.

De acuerdo con el documento, entre las proveedoras que simularon ser competidoras se encontrarían Grupo de Servicios Monte Grande, Comercializadora Morelos, Limpieza Val y Green Mamba Services, además de las dos ya mencionadas. Lo curioso es que el escrito fue ingresado desde el 9 de septiembre pasado. ¿Hará falta que la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, vigile los tiempos de cada uno de sus brazos?

                                                                                                          @1ahuerta