Derivado de la contingencia sanitaria por Covid- 19 la Secretaría de Seguridad (SS) del Estado de México informó que desde el pasado 7 de marzo de 2020 el sistema penitenciario estableció cercos sanitarios en los ingresos de todos los establecimientos penitenciarios a su cargo, con el propósito de reducir el riesgo de contagio de los visitantes a la población carcelaria.

En un comunicado la SS destacó que identificaron a los grupos vulnerables, tanto personal penitenciario como Personas Privadas de su Libertad (PPL); en los funcionarios fueron enviados a sus casas y en tanto a los internos se les aisló del resto de la población

También tomaron la decisión de cancelar temporalmente la visita familiar para salvaguardar la salud de los internos y sus familias; de lo cual no se reporta incidencia.

Además realizan acciones de limpieza y sanitización de las áreas comunes, así como de las estancias que cada Centro estableció y acondicionó como espacios eventuales para aislar del resto de la población aquellos casos que pudieran ser considerados como sospechosos.

Se amplió el horario de entregas de apoyo de familiares a sus internos en todos los centros, que ocurre todos los días de la semana. Además, se pueden realizar llamadas telefónicas gratuitas.

Las entregas se realizan bajo protocolos de sana distancia: toda persona que ingrese a un penal esta obligada a desinfectar sus manos, les toma la temperatura y portan cubrebocas.

La dependencia indicó que han distribuido a los reos más de 100 mil cubrebocas y al personal les han entregado 80 mil guantes de látex y particularmente al personal médico, se le ha dotado de 2,500 máscaras N95; 15 mil caretas y 4,500 trajes impermeables.

En coordinación con las familias se han externado a 25 menores hijos que vivían con sus madres en reclusión en tanto subsista la contingencia sanitaria.

Debido a la insuficiencia de espacio que existe en diferentes centros penitenciarios para aislar a posibles sospechosos y casos confirmados, se habilitó un área-hospital con una capacidad para atender al menos 200 internos en el Centro Penitenciario de Neza-Norte.

En esas instalaciones hay personal médico permanente con las herramientas adecuadas y un área aislada y sanitizada; en caso de alguna complicación se tiene un convenio con la Secretaría de Salud del Estado de México para tratar aquellos casos con contagio de COVID-19 y que por su cuadro clínico requieran de soporte hospitalario.

La dependencia señaló que fue el primer Sistema Penitenciario a nivel nacional en adoptar e implementar los Estándares Especiales UNAPS COVID-19, de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

 

ica