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Esta semana la Secretaría de Gobernación difundió sus observaciones sobre violaciones a derechos humanos, durante la contingencia sanitaria por el Covid-19, y en ellas resalta que de acuerdo a sus análisis diversos gobernadores al poner medidas sanitarias que previnieran la propagación del virus pudieron poner en riesgo la protección y garantía de los derechos humanos.

El documento elaborado por dicha dependencia detalla que la emergencia sanitaria no representa el establecimiento de un estado de excepción y suspensión de garantías.
Uno de los primero puntos que desarrolló es que los cierres de fronteras, caminos y carreteras, así como los toques de queda, retenes y otras medidas restrictivas al libre tránsito fueron medidas que no debieron aplicarse.

Lo curioso de este análisis es que durante semanas las autoridades federales y estatales han sostenido reuniones y videoconferencias con la propia secretaria de Gobernación y en ellas de acuerdo a los propios gobernadores nunca hubo queja de sus acciones.

Para Gobernación las acciones más preocupantes fueron el establecimiento del “Toque de queda” en al menos 31 municipios de 11 estados al 22 de abril: Guerrero, Michoacán, Quintana Roo, Yucatán, Jalisco, Baja California, Sonora, Chihuahua, Morelos, Coahuila y Nuevo León.
Asimismo criticó que el Gobierno de Sonora anunció desde el 13 de abril el programa “Quédate en casa obligatorio”, imponiendo multas a las personas por incumplir el confinamiento obligatorio y facultando a las corporaciones policiales a arrestar con uso de la fuerza pública a las personas. Por su parte los gobiernos de Michoacán y Jalisco decretaron el aislamiento obligatorio, colocando multas, arrestos y trabajo comunitario a la persona que lo incumplan.

Lo cierto es que el tiempo será el que dé la razón a cada entidad federativa, ya que el reto a la fecha en todo el mundo y más en el país es disminuir la movilidad, los contagios y evitar el fenómeno que estamos viendo en la parte dentro del país, que es la saturación de hospitales públicos y privados.

En otros temas, es interesante el nombramiento de Horacio Duarte en la Dirección General de Aduanas. Una de las áreas en donde desde años ha privado la corrupción y el mal manejo. Al inicio de la actual administración fue el hoy subsecretario de Gobernación Ricardo Peralta, quien durante cuatro meses tomó el control.

En ese tiempo por fin se lograban ver los resultados que en años no habían pasado, incluso su sucesor Ricardo Ahued no logró dar golpes semejantes y optó por renunciar. Ricardo Peralta en esos cuatro meses, buscó modernizar la videovigilancia con 60 equipos de Rayos X y nueve equipos para la revisión de carga. Además de realizar operativos al interior de las aduanas para detectar los actos de corrupción.

 

Durante este periodo, se lograron incautar: 818.35 kg de cocaína, 15.84 kg de fentanilo, 2.67 kg de heroína, 7,423 kg de mariguana, 494.62 kg de metanfetaminas y 764 pastillas psicotrópicas.
Asimismo, se incautaron 3 millones 705 mil 838 dólares, 37 armas, 676 cargadores y 18, 500 cartuchos. Fueron detenidos 107 personas, cesados 14, cesados con carpeta de investigación cuatro.

El querer acabar con el negocio de muchos tocó fibras muy sensibles, pues reditúa millones de pesos en corrupción. La pregunta que nos hacemos es ¿quién podrá dar continuidad al plan original para terminar con el “monstruo de 100 cabezas” como calificó el Presidente a las Aduanas de México?