Foto: Reuters Hoy en día, señaló Ortiz, aunque hace falta un análisis autocrítico profundo, la nación de América del Sur es un estado social, con un Gobierno democrático e institucional  

Este 19 de julio, el movimiento sandinista celebra 40 años del triunfo de la Revolución que puso fin a la dictadura que ejercía la familia Somoza.

En el marco de dicho aniversario, el Comité Mexicano de Solidaridad con Nicaragua y la Cámara de Diputados llevarán a cabo hoy un foro para discutir los logros y la perspectiva del movimiento hacia el futuro.

“Debemos reivindicar, reconocer, respaldar y revalorar el papel de la Revolución Sandinista, el proceso revolucionario de Nicaragua está en su momento más importante, más sólido hoy en día. Hay que valorar el reconocimiento de esa Revolución, que terminó con una dictadura militar que acabó con la democracia”.

Así lo consideró José Antonio Ortiz, primer responsable del Comité Mexicano de Solidaridad con Nicaragua, una reedición de los antiguos comités con sede en México, como el “Manos fuera de Nicaragua” o “No pasarán”.

Participarán en el encuentro, entre otros, la comandante de la Revolución Popular Sandinista, Doris Tijerino Haslam y el embajador de Nicaragua en México, Juan Carlos Gutiérrez.

Hoy en día, señaló Ortiz, aunque hace falta un análisis autocrítico profundo, la nación de América del Sur es un estado social, con un Gobierno democrático e institucional.

“Hace 40 años hubo un rompimiento de un régimen feudal, autoritario, represor, incapaz de ir más allá en las necesidades que tienen los países y los pueblos; entonces surgen los movimientos armados, movimientos políticos, de todo tipo de sectores, y se revelan. Eso sucedió en Nicaragua con los rebeldes encabezados por Carlos Fonseca Amador y una serie de dirigentes”, añadió.

LEG