Cerca de 20 niños acompañados de sus padres se manifestaron afuera del Antiguo Palacio del Ayuntamiento para solicitar una audiencia con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ante el anuncio de la desaparición del Programa Integral para el Diagnóstico y Atención a la Sobredotación Intelectual (Pidasi).

A decir de Rocío Alonso, madre de dos niños superdotados, “la jefa de gobierno se refirió de manera despectiva a los menores con tal capacidad, incluso afirmó que no existen estudios para comprobar su alto coeficiente, cuando existen muchos análisis alrededor del mundo”.

Explicó que los menores que tienen un coeficiente intelectual de 130 puntos o más requieren una forma distinta de aprendizaje, debido a que tienen otras inquietudes y capacidades, por lo que no tendrían que estar incluidos en el programa Niños Talento, como pretende el Gobierno capitalino.

 

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