Foto: Miguel Ángel Ensastigue Benito Javier Torres recibe a indigentes en la Parroquia de la Santa Cruz y la Soledad, en la calle Santa Escuela 12, y confía en obtener apoyo de la comunidad para continuar con su labor  

Para que no duerman en la vía pública y puedan pasar una noche cálida, Benito Javier Torres Cervantes, sacerdote a cargo de la Parroquia de la Santa Cruz y la Soledad, ofrece albergue y comedor gratuito a personas en situación de calle, y lo hará hasta finales de febrero de 2019.

Además, les ofrecen talleres con los que buscan acercarlos a una vida sana, alejada de las adicciones.

Las puertas del templo, ubicado en Santa Escuela 12, Centro, en la delegación Venustiano Carranza, se abren a partir de las 20:30 horas para recibir a todas las personas que no tengan un lugar dónde dormir.

Posteriormente reciben una cena, se les presta un colchón y cobijas para descansar, al siguiente día, aproximadamente a las 6:30 horas, después de desayunar y organizar su espacio, pueden marcharse.

Durante la noche existen guardias de voluntarios que están al cuidado de ellos para llevarlos al baño o por si necesitan atención médica.

“Dicha labor estaba planeada para llevarse a cabo con las personas que siempre están en los jardines cercanos a la iglesia o por las calles de La Merced. Actualmente también recibimos gente que viene desde la Basílica de Guadalupe, el Centro Histórico y otros rumbos; es algo muy bonito porque entre ellos se pasan la voz y se acercan a la parroquia”, declaró Torres Cervantes.

Con un espacio diseñado para 100 individuos, por el momento reciben de 60 a 80 personas por noche, y el clérigo espera que en diciembre crezca el número de albergados, por lo que la gente que esté interesada en contribuir al proyecto puede solicitar informes en la parroquia.

LEG