Foto: Daniel Perales Me siento afortunada, porque ahora le doy gracias a Dios de que tengo mi casita; pero no me acostumbro, no ha dejado de temblar: María  

María del Carmen Caballero García, habitante de Juchitán, Oaxaca, dijo que se siente afortunada, ya que su esposo, su hija y ella sobrevivieron durante el sismo del 7 de septiembre, ocurrido hace un año en esa región; y aunque su casa de tejavana se desplomó, ahora habita en una nueva y antisísmica que le donaron.

“Eran como las 11 de la noche; yo me encontraba con mi hija y mi esposo cuando se sintió un ruido fuerte en el suelo. Pudimos salir al patio y ahí nos detuvimos los tres, nos caíamos porque parecía gelatina todo. Los gritos de la gente asustada se escuchaban. Después de que se calmó el movimiento se fue por completo la luz. Quisimos salir a la calle, pero nuestra puerta estaba atorada. Algunos vecinos llegaron para ayudarnos a abrir el zaguán y así salir; todo en la avenida estaba oscuro”, relató Caballero García a 24 HORAS.

“Esa noche nos quedamos en el patio junto con otra familia. Fue a través de mi hijo, quien vive en la Ciudad de México, que nos enteramos de que el temblor fue muy grande y que hasta el Palacio Municipal se cayó. Pero nosotros no sabíamos nada, porque no teníamos luz. Fue hasta el día siguiente, ya con la luz del día, que pudimos ver los daños que sufrió la casa; tenía las trabes salidas”.

Aunque su vivienda estaba dañada, la familia ingresó para rescatar documentos, ropa y cobijas, entre otros objetos, “pero nunca nos imaginamos que con el sismo (posterior) del 23 de septiembre, que fue a las siete de la mañana, mi casa se caería por completo; luego jaló otra y otra casa más”.

“Todo el mes de septiembre y octubre vivimos en la calle, junto con los vecinos, hasta que llegó la demolición. Llegó el gobernador y nos dijo que iba a venir la Fundación Carlos Slim, que nos iban a apoyar en la construcción de nuestras casas”.

Caballero García dijo sentirse afortunada, ya que mediante el apoyo del Gobierno de Oaxaca y de la Fundación Carlos Slim ahora tiene una casa nueva y antisísmica, de dos pisos, cuatro recámaras, dos baños, cocina-comedor, refrigerador y cocineta.

“Nos explicaron los ingenieros que a la casa le pusieron una plancha antisísmica para resistir los temblores, es térmica y con vigas más resistentes. Iniciaron en enero y en marzo nos la entregaron. Cuando me dieron las llaves de la casita sentí emoción y a la vez tristeza, porque algunos paisanos aún no tienen un techo dónde dormir y cubrirse del calor, la lluvia y los vientos”.

LEG