Foto: Reuters RECLAMO. Miles de estudiantes se manifestaron el fin de semana para exigir el control de armas en EU, donde su portación es un derecho, defendido por la Asociación Nacional del Rifle que financió la campaña electoral de Trump  

WASHINGTON.- Detrás de las sonrisas del Presidente Donald Trump ante las cámaras, se esconde una realidad muy diferente.

Continúa frustración a causa de la profunda crisis causada por su narcisismo, inexperiencia, carácter dominante y actitud visceral, que constituyen un obstáculo para quienes trabajan con él.

A eso se atribuye la salida de Rex Tillerson del Departamento de Estado, y de HR Mc Master, su Asesor de Seguridad Nacional, quienes recomendaron guardar distancia con el presidente ruso Vladimir Putin a quien felicitó tras su reelección, o del Jefe de Asesores Económicos Gary Mc Gahn quien se opuso a imponer aranceles al acero y recientemente de John Dowd, abogado quien lo representó en la investigación sobre la injerencia rusa en la elección presidencial.

Pero se esperan muchos cambios más, “lo que es perturbador, desmoralizador y afecta la eficiencia de quienes trabajan en la  agenda del Presidente Trump” dice la analista Kathryn Dunn, de la Institución Brookings.

“Hasta enero 19 de 2018, aniversario de su toma de posesión, la tasa de cambios y remociones de 7 de los 12 funcionarios del más alto nivel en la Casa Blanca, llegó a un record de 34%, el doble del 17% de Ronald Reagan, en ese periodo de tiempo y casi el triple del 9% de su antecesor Barack Obama” de acuerdo a la analista.

“Transcurridos casi 14 meses, el presidente Trump despidió, acepto renuncias o cambio al 14% adicional de personal del más alto nivel (A) elevando el porcentaje de cambios a 48%, nunca antes visto” explica la analista Kathryn Dunn.

Eso que podría aumentar con la salida de otros prospectos: Don Mc Gahn Asesor Jurídico de la Casa Blanca, quien supervisó la nominación de 29 jueces federales, revirtió regulaciones de Barack Obama en medio ambiente, energía, salud, servicios financieros e industriales y atiende una gran cantidad de asuntos y el Gen. John Kelly, su segundo Jefe de Gabinete.

Mike Pompeo, ex director de la CIA es su segundo Secretario de Estado y John Bolton su tercer asesor de Seguridad Nacional.

En un ambiente de más preocupación en el ala Oeste de la Casa Blanca, donde asistentes hablan de su futuro a puertas cerradas, muchos consideran que más confiado en su trabajo e instintos, el presidente Trump podría tener en mente cambios más dramáticos en su gabinete, así como cambios en la estructura de poder, incluyendo el papel del Jefe de Gabinete.

Trump ordenó que todos sus asistentes firmen acuerdos de confidencialidad, en la busca de más control dentro de la mansión, para evitar la filtración de información.

De acuerdo al periodista y editorialista George Will, del diario The Washington Post, “el hecho de que John Bolton tenga 5 cualidades de las que carece el Presidente Trump -inteligente, educado, con principios, articulado y experimentado- y por su proximidad al Presidente, será pronto el segundo estadounidense más peligroso.”

Will asegura que Bolton será “el primer asesor de Seguridad Nacional que, al ingresar a la Oficina Oval, sugerirá la posibilidad de aventuras bélicas contra Corea del Norte e Irán” y quien sólo difiere con el Presidente en torno a Vladimir Putin, contra quien es implacablemente hostil, a diferencia de Trump, que lo admira.

Esa nominación es vista como un paso hacia los cambios que busca el Presidente, para lo que también tendría un mayor apoyo de Mike Pompeo en el Departamento de Estado.

Lo que tendrá impacto en la política hacia naciones como Corea del Norte, con cuyo líder Trump espera reunirse, así como hacia Irán y Rusia.

Aunque se retiró el fin de semana pasado a la “Casa Blanca de Verano”, cuya estancia cuesta casi 4 millones de dólares el fin de semana a los contribuyentes estadounidenses, para ver de lejos la Marcha por Nuestras Vidas, con más de 800 manifestaciones en todo el país con miles de estudiantes, parte de la “Generación de Balaceras Escolares” y exigen leyes razonables para frenar las masacres, Trump enfrenta más desafíos esta semana.

Como las consecuencias de su imposición de aranceles a las importaciones de acero y aluminio, de las que excluyo a México y Canadá pero causaron tensión con aliados europeos y del continente.

Y las tarifas por 60 mil millones de dólares a importaciones de China y limitaciones de inversión en la industria tecnológica en EU a partir de 15 días, por las que se espera una guerra comercial, que iniciaría con represalias Chinas por 3 mil millones de dólares, enfocadas a los productores de carne de puerco y de soya de 10 estados donde Trump consiguió más apoyo, así como la cancelación de órdenes a Boeing.

La firma de los aranceles el viernes  causó el desplome de 900 puntos del mercado de valores.

El Primer Ministro Chino Li Keqiang urgió a la mesura y prometió que China podría abrir su economía a empresas e inversionistas de Estados Unidos y no forzarlos a compartir su tecnología, a cambio de suspender los aranceles “antes de una guerra comercial que no beneficiaría a nadie”.

Desde el año 2000, el comercio entre Estados Unidos y China se incrementó de 116 mil millones de dólares a 635 mil millones de dólares, lo que podría verse afectado con los aranceles impuestos.

“La cuenta la pagarán consumidores americanos que pagarán más al comprar artículos que usan cada día” dijo Hun Quach, vicepresidente de la Asociación de Líderes Industriales Internacionales.

“Las sanciones impuestas a China son muestra de un típico proteccionismo unilateral”, respondió el Gobierno de China quien calificó la medida como “muy mal precedente” explicando que “si bien no quiere una guerra comercial, tampoco tiene miedo de ella.”

Trump también encontrará el problema que implica el desafío judicial de la estrella porno Stormy Daniels y la ExPlaymate Karen Mc Dougal, que reclamando su derecho para contar sus aventuras extra maritales con el presidente Trump, desafiaron recursos impuestos por la Casa Blanca.

Peggy Peterson, alias “Stormy Daniels” concedió una amplia entrevista a Anderson Cooper de la cadena CNN y al programa 60 Minutos, de la Cadena CBS, para contar detalles del affair con el presidente, mientras Melania se recuperaba tras dar a luz al hijo de ambos, ahora de 12 años de edad.

Stormy se ampara en que el presidente, cuyos abogados la amenazaron físicamente además de exigirle el pago de 20 millones de dólares por violación del contrato de confidencialidad, no firmó el convenio en el que apareció bajo el seudónimo de David Dennison.

Y la ex playmate Karen Mc Dougal, quien concedió otra larga entrevista al periodista Anderson Cooper de CNN en la que dio detalles de su relación con Trump, de 10 meses, durante los que, dijo, estuvo enamorada. Ella vendió su historia al tabloide National Enquirer por 150 mil dólares, pero nunca fue publicada.

A ello se suma la decisión de un Juez Federal, que autorizó a que se proceda con la demanda de Summer Zervos, quien participó en el programa “El Aprendiz” quien acusa al presidente Trump de besarla y tocarla por la fuerza, sin su consentimiento, por lo que Trump podría comparecer ante la Corte Federal a rendir testimonio.

Eso, además, abre la posibilidad de que otras de las 16 mujeres que han acusado al presidente de asalto sexual, puedan presentar demandas similares. De acuerdo a encuestas de la Universidad Quinnipiac, estos casos aumentaron la desaprobación de mujeres a 62%. Un 55% de mujeres blancas que apoyaron a Trump están en desacuerdo. 56% de mujeres quieren una cámara de Representantes Demócrata.

Otra encuesta del Pew Center indica que Trump no sólo pierde apoyo de mujeres educadas, sino de blancas no educadas en el campo que inicialmente lo apoyaron en gran proporción.

Y por si fuera poco, mientras sus abogados negocian la posibilidad de que se entreviste con el Fiscal Especial Robert Mueller, que investiga la injerencia rusa en la Elección Presidencial, Trump enfrenta la difusión de nuevos mensajes electrónicos proporcionados por George Papadopulos, que desmienten que el asesor de política externa del Comité de Campaña, haya sido un “cofee boy” como dijo antes el Presidente, ya que los términos en que se refieren a él y las funciones que desempeño, demuestran lo contrario, en mensajes en los que se le autorizó y motivó para buscar contactos rusos que ofrecían información negativa sobre Hillary Clinton.

@GregorioMeraz1

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