Foto: Reuters El argumento del mandatario estadounidense es que los astilleros militares y los proyectos de infraestructura dependen demasiado del acero importado  

Sin apuntar todavía a ningún país en particular, el anuncio del presidente de EU, Donald Trump, de que impondrá aranceles al acero y el aluminio prendió las alertas ante el temor de que la medida desencadene una guerra comercial. Por lo pronto, la Canacero espera que México responda de manera recíproca si se le aplica dicho impuesto.

 

El presidente Donald Trump anunció este jueves que la próxima semana instaurará un nuevo arancel global del 25% al acero y del 10% al aluminio con el objetivo de salvaguardar la seguridad nacional. En el caso del primero, México se ubicó en enero pasado como el cuarto exportador a ese país, después de Corea del Sur, Brasil y Canadá, y que en conjunto aportaron 56% del volumen exportado a territorio estadounidense.

 

Tras el anuncio de este jueves, el sector acerero nacional fijó su postura al señalar que México deberá responder con una medida similar de manera inmediata. La industria (que aportó 1.9% del PIB nacional en 2016) espera no obstante que el país sea excluido de la sección 232, “a fin de evitar una guerra comercial que afectaría a las cadenas productivas de ambos países”.

 

El argumento del mandatario estadounidense es que los astilleros militares y los proyectos de infraestructura dependen demasiado del acero importado, que es más barato, lo mismo que la industria automotriz, por lo que con esta medida se propone incentivar la industria estadounidense.
Trump no señaló a algún país, pero el secretario de Comercio, Wilbur Ross, subrayó en el documento, conocido como Informe 232, que China es “el gran responsable” del exceso de acero en los mercados internacionales, ya que “solo en un mes produce lo mismo que EU en todo un año”.

 

El Gigante Asiático fue el décimo exportador de acero a EU en enero pasado, cuando representó 2.5% del total.

 

Un día antes, el miércoles, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, manifestó a medios que comunicaría a su homólogo de EU, Wilbur Ross, que se aplicarán aranceles si Estados Unidos decide establecer impuestos a las importaciones mexicanas de acero.

 

En Wall Street, la noticia no se recibió con agrado. Al cierre de la jornada, el Dow Jones de Industriales perdió 1.68%, mientras el selectivo S&P 500 se redujo 1.33% y el compuesto Nasdaq cayó 1.27%.

 

Los operadores reaccionaron con preocupación ante la posibilidad de que las políticas proteccionistas puedan afectar a los consumidores estadounidenses, pero también cobró fuerza el temor a represalias o una posible guerra comercial, pese a que Trump no precisó los países que se verían afectados con la medida.

 

José Ángel Espinosa

aarl