CARACAS.- A la crisis política y económica de Venezuela se suma una sanitaria por la escasez de medicamentos.

 

Este problema afecta a los centros hospitalarios como los del estado Portuguesa, según denunció María Beatríz Martínez, diputada a la Asamblea Nacional por esa entidad y excandidata a la gobernación.

 

Los hospitales no cuentan con medicinas, insumos, ni con la atención que han pedido para que desde el Ejecutivo se abra un canal humanitario para  evitar que la mortalidad aumente y se propaguen enfermedades en un pueblo carente de protección y sumergido en miseria, señaló a El Nacional de Venezuela.

 

El gobierno inició la víspera la distribución gratuita de medicinas a 35 mil 651 pacientes, en un plan estatal que busca paliar la aguda escasez de fármacos en el país, estimada en 95 por ciento por el gremio médico.

 

El presidente venezolano Nicolás Maduro relanzó en octubre el sistema 0800SaludYa, para la solicitud de medicamentos vía telefónica. Quienes los piden deben tener el ‘Carnet de la Patria‘, tarjeta electrónica para acceder a programas sociales que la oposición denuncia como un instrumento de “control social”.

 

Sin embargo, el número de beneficiarios está lejos de satisfacer la demanda, ya que pacientes crónicos con enfermedades como insuficiencia renal, cáncer, esclerosis múltiple se ven afectados por el desabastecimiento de medicinas.

 

Aunque Maduro niega que exista una crisis humanitaria, denuncia que las sanciones financieras impuestas por  Estados Unidos contra Venezuela afectan la importación de alimentos y medicinas.

 

La crisis sanitaria se disparó desde 2014, con el desplome del precio del petróleo, materia prima de la cual depende Venezuela al ser uno de los mayores productores de crudo en el mundo.

 

Las personas de la tercera edad son uno de los sectores más afectados, ya que a la escasez de productos básicos, la inestabilidad económica y la delincuencia, se suma la falta de medicamentos.

 

La situación más crítica es para los ancianos que se van quedadno solos, porque sus hijos han emigrado en busca de mejores oportunidades.

 

Gilberto -que por seguridad pidió no expone su apellido- tiene 78 años. La mayor de sus dos hijas vive en República Dominicana desde hace cuatro años cuando decidió emigrar para “buscar un mejor futuro para su pequeña de dos años”; su segunda hija inició la misma aventura hace seis meses hacia Colombia.

 

Él es viudo y dice gozar de salud salvo un eventual dolor de cadera y “alguna que otra subida de tensión”; sin embargo, debe mantener un tratamiento para controlar la presión arterial y afirma que lo cumple a medias debido a que no encuentra los medicamentos desde hace varios meses.

 

“Mi hija brincaba de un lado a otro para encontrarme las medicinas, hacía colas, las compraba bachaqueado (revendido informalmente), a veces encontraba quién se las donara. Ahora no está ella y yo no las encuentro, y si hago cola me mata el dolor de cadera. Cuando la encuentro parto la pastillita y me tomo sólo media dosis”, dijo.

 

 

Cambia gabinete

Nicolás Maduro modificó ayer a parte de su gabinete al cambiar a los titulares de cuatro ministerios, entre ellos el de Petróleo y Energía, donde quedó el militar Manuel Quevedo, también presidente de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). También designó a Carlos Osorio, sancionado por EU, como ministro de Transporte, debido a que el general Juan García Toussaintt, que se desempeñaba en cargo, presenta una situación de salud que le impide seguir en el cargo.

 

 

 

*edición impresa 24 Horas

 

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