La muerte del fiscal argentino Alberto Nisman, hallado sin vida la víspera en su departamento de Puerto Madero días después de haber denunciado a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por encubrimiento en la causa por el atentado a la AMIA, ha desatado el repudio social y desde las 19:00 horas miles de personas se suman a movilizaciones y cacerolazos en distintas ciudades del país.

 

La consigna es la esperada: “Todos somos Nisman”. Así ciudadanos se apostaron frente a la quinta presidencial de Olivos, Plaza de Mayo y diferentes barrios de Buenos Aires así como en  Rosario, Córdoba y la Costa Atlántica. Muchos portan banderas albicelestes.

 

Las manifestaciones fueron convocadas espontáneamente a través de las redes sociales y se reprodujeron en ciudades Mar del Plata, Mendoza, Santa Fe, La Rioja y San Luis, pero la mayor tuvo lugar en la capital.

 

Miles de bonaerenses tomaron las principales avenidas de la ciudad y se concentraron en la emblemática Plaza de Mayo, con pancartas y carteles también de “Justicia por Nisman” o “Todos somos Nisman”, así frente a la residencia presidencial en las afueras de la ciudad, donde desde temprano las autoridades redoblaron la custodia policial y montaron vallas.

 

Junto a los cacerolazos, las bocinas y los aplausos, los porteños gritaron consignas contra el gobierno y la presidenta Fernández de Kirchner, que la semana pasada fue denunciada por Nisman por la firma de un acuerdo con Irán que supuestamente implicaba encubrir a algunos de los principales acusados del atentado contra la mutual judía.

 

En la Plaza de Mayo se escucharon consignas de “que se vayan todos, que no quede ni uno solo”, “se va a acabar, se va a acabar la dictadura de los K” y hasta gritos de “asesina” dirigidos a la mandataria argentina.

 

“En primer lugar estoy acá en defensa de las instituciones, en defensa de que la democracia mantenga la división de poderes y en función de que es muy llamativo todo lo que sucedió”, dijo a la agencia EFE un manifestante en inmediaciones de la Plaza de Mayo.

 

“Yo estoy acá como un ciudadano mas queriendo un país mejor con todas las instituciones funcionando y reclamando para que se investigue”, explicó Pepe, otro argentino que se unió a la manifestación.

 

“Nosotros tenemos integridad, tenemos moral, rendimos cultura al trabajo y es la mejor herencia que le podamos dar a nuestros hijos”, continuó, al borde de las lágrimas.

 

Otra vecina de Buenos Aires se mostró “acongojada” porque “esto es lo peor que le pudo pasar al país”.

 

“Estoy acá para defender a la Argentina en este caso por el fiscal Nisman”, apuntó otro de los asistentes.

 

También se sumaron algunos políticos de oposición, quienes durante la jornada reclamaron celeridad en la investigación por la muerte de Nisman.

 

La Unión Cívica Radical aseguró, a través de su presidente, el senador Enresto Sanz, que impulsarán movilizaciones en todo el territorio nacional.

 

“La UCR convoca a que la sociedad se exprese de la manera que crea conveniente. La UCR no sólo va a acompañar sino que va a alentar las movilizaciones”, sostuvo Sanz.

 

La concentración de Buenos Aires alcanzó puntos de máxima tensión cuando varios manifestantes intentaron saltar las vallas que acordonan la Casa Rosada.  En Mar del Plata se manifestaron en Mitre y Luro.

 

En Rosario, el punto de encuentro fue el Monumento a la Bandera. “Tumbaron al hombre pero no a la idea”, coreaban; en tanto en Pinamar la reunión fue en Bunge y Libertador; en Bariloche lo fue el Centro Cívico donde los colonos cantaron el Himno y exigieron justicia. (Con información de EFE)