Con la ampliación de la fecha para el ingreso de vehículos extranjeros usados al país, usuarios particulares buscarán la regularización de entre 750 mil y un millón de autos usados que circulan en la República y que no cuentan con placas nacionales.

 

De acuerdo con César Villalba, coordinador nacional de la Organización Nacional de Protección al Patrimonio Familiar (Onappafa), la nueva ampliación en el plazo para la importación de autos foráneos significa una oportunidad para establecer mesas de diálogo con el gobierno a fin de regularizar estos vehículos y quitar las restricciones para la entrada de unidades al país, como establece el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

 

Según el acuerdo, a partir del 1 de enero de 2009 “México no podrá adoptar ni mantener una prohibición o restricción a la importación de vehículos originarios usados, provenientes de territorio de Canadá o de Estados Unidos que tengan por lo menos 10 años de antigüedad”.

 

No obstante, Villalba acusó que las restricciones arancelarias impuestas por el SAT para el paso de estos autos elevan los costos de importación entre 40 mil y 50 mil pesos, 300% más que en 2006, lo que hace incosteable el paso de vehículos por particulares.

 

“Los vehículos siguen circulando y va a ser imposible sacar un millón de automóviles no regularizados que circulan en el país, el gobierno se cierra a resolver un mal que ya tenemos y que sólo podremos resolver regularizando las unidades y vigilando las aduanas y fronteras para evitar la corrupción”, señaló.

 

De acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), de 2005 a octubre pasado ingresaron al país 7.5 millones de vehículos usados, de los cuales poco más de un millón se quedaron en la zona fronteriza.

 

El presidente de la asociación, Eduardo Solís, manifestó en meses anteriores que este tipo de vehículos representan una competencia desleal para los fabricantes nacionales, ya que tiene efectos nocivos sobre el mercado interno al generar una sobre oferta brutal de autos en circulación.