Quedó en el pasado la oscuridad que envolvió por muchos años al basquetbol mexicano. Los malos resultados y problemas entre las asociaciones impidieron un desarrollo óptimo del deporte ráfaga en nuestro país, una situación que cambió desde que la Conade decidió tomar las riendas de la Federación Mexicana de Baloncesto.

 

El despertar de este deporte es evidente. Lo hecho por el seleccionado nacional en el Centrobasket que se desarrolla en Tepic, Nayarit es tan sólo una muestra del despertar del basquetbol, y del trabajo hecho por las autoridades para rescatar a una disciplina que estaba en el olvido, que no recibía los apoyos necesarios para sobrevivir bajo el mando del controvertido Jorge Toussaint.

 

El equipo comandado por el español Sergio Valdeolmillos tuvo una participación histórica en el evento organizado por la FIBA Américas después de conseguir un boleto no sólo a los Juegos Panamericanos que se realizarán el próximo año, dónde tratarán de mejorar la plata que cosecharon en Guadalajara 2011, también el pase al Preolímpico que se realizará en Monterrey.

 

La victoria que consiguió ante Cuba, fue clave para que el representativo alcanzara ese par de objetivos que se planteó Valdeolmillos con sus jugadores, pero habrá poco tiempo para festejar porque tienen en puerta el Mundial de Basquetbol, que se desarrollará a finales del mes en curso y en septiembre en España.

 

El boleto para esta última justa llegó de manera sorpresiva después de que el equipo obtuvo la presea de oro en el Premundial. La quinteta no logró su calificación a la justa, pero fue invitada tras la suspensión impuesta por la Federación Internacional de Basquetbol (FIBA) a Panamá debido a los conflictos que agobian el deporte en ese país centroamericano.

 

Fue entonces cuando se dio ese despertar de uno de los deportes más populares en México, cuando se logró ese boleto a la justa mundialista por primera vez en la historia, y ahora se ratifica con el gran accionar durante el Centrobasket donde el equipo hizo una excelente labor que le permitió calificar al Preolímpico.

 

La mayoría de los jugadores se encuentran en equipos mexicanos, salvo Gustavo Ayón, la máxima figura, que forma parte del Atlante Hawks y Jorge Gutiérrez de los Nets de Brooklyn, ambos de la NBA, sin olvidar a Héctor Hernández que forma parte del San German de Puerto Rico y Paul Stoll del Trabzonspor de Turquía.

 

De hecho, Gutiérrez es el único que tiene un puesto seguro en los Estados Unidos ya que cuenta con contrato vigente, mientras que Ayón aún deberá negociar y, en caso de no llegar a un acuerdo, podría emigrar a España donde varios equipos han mostrado interés por sus servicios.

 

La selección mexicana ya tiene la mente puesta en el Mundial, que es el objetivo inmediato, sin olvidar los Juegos Panamericanos ni el Preolímpico donde, por increíble que parezca, el equipo de Valdeolmillos será uno de los favoritos no sólo porque jugará de local, también por el nivel mostrado en los últimos años.