Por segunda ocasión en sólo 21 días, fuerzas federales estuvieron a punto de capturar al líder de Los Caballeros Templarios, Servando Gómez Martínez, La Tuta.

 

La operación más reciente, ocurrida el miércoles, permitió reducir el perímetro de seguridad en el que se desplaza el capo en Michoacán, porque fueron detenidos seis de sus principales escoltas, entre ellos el sicario identificado por las autoridades como su “brazo derecho”.

 

A penas 122 kilómetros separan los dos puntos donde el capo ha sido ubicado recientemente por fuerzas federales.

 

Hace tres semanas, el 20 de marzo, en la localidad de Infiernillo, municipio de Arteaga, marinos detectaron el movimiento de una célula templaria, donde se cree estaba Servando Gómez. En aquella ocasión, hubo un enfrentamiento que impidió su captura.

 

La noche de este miércoles, en la comunidad de El Caulote, en el municipio de Parácuaro, de nuevo se montó operativo para aprehenderlo, pero sólo seis de sus operadores más cercanos cayeron.

 

De acuerdo con el reporte de los enfrentamientos, e información aportada por grupos de autodefensas, La Tuta ya sólo es capaz de desplazarse por zonas serranas de los municipios de Apatzingán, Aguililla, Tumbiscatío, Arteaga, Los Reyes y Parácuaro.

 

Aunque el seguimiento más preciso de los movimientos del máximo líder templario se inició hace al menos seis meses, su detención ha sido más complicada porque las fuerzas federales tienen la orden de capturarlo vivo, para que pueda ser interrogado sobre su red criminal y de corrupción en el estado.

 

Los escoltas

 

Este miércoles en la noche, en la comunidad de El Caulote, Parácuaro, ubicado a 20 minutos de Nueva Italia, Múgica, donde persisten los conflictos por el desarme de autodefensas, un grupo elite de la Policía Federal montó un operativo y localizó a una célula fuertemente armada, que pudo ser sometida y poco después fueron identificados como integrantes del primer círculo de seguridad de Gómez Martínez.

 

El comando era dirigido por Juan Salomón Hurtado, de 42 años de edad, que se identificó como jefe de sicarios al servicio de La Tuta y hombre de confianza del capo.

 

Bajo su mando fueron detenidos Víctor Manuel Hernández Gómez, de 35 años; José Cuevas Álvarez, de 49; Gustavo Hernández Gómez, de 44; Antonio Castañeda Cruz, de 28, y José Luis Aguilera Hernández, de 21.

 

Y les fue asegurados un arsenal: dos rifles de asalto tipo AK-47, calibre 7.62 x 39mm; uno AR-15, modificado a calibre 7.62 x 39mm, y uno más calibre 30.06; así como varios cargadores para estas armas.  También un arma corta calibre 38 súper, con 3 cargadores y 22 cartuchos útiles; y dos cortas 38 súper con dos cargadores, y 28 cartuchos útiles.

 

Tenían en su poder un auto de la marca Mazda, con placas del estado; una camioneta; una bolsa con 380 gramos de marihuana y 21 envoltorios de cristal

 

“Tenemos más hombres”

 

Salomón Hurtado, revelaron fuentes federales, confirmó a los agentes que lo capturaron, que su jefe La Tuta se mueve, casi todos los días, en un perímetro que no rebasa más de cinco o seis municipios, pero aseguró que aún le quedan hombres en distintos puntos para protegerse.

 

Este diario publicó que de acuerdo con declaraciones de otros lugartenientes del grupo, Gómez Martínez optó, a diferencia de los otros líderes de los templarios, por esconderse en las zonas serranas con sus sicarios, en vez de adoptar por un bajo perfil en otra ciudad del país.

 

Autoridades ministeriales indicaron que los seis sicarios detenidos en Parácuaro fueron trasladados ayer a la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en Morelia, para que rindieran una declaración ministerial. Se espera que este sábado se defina su situación jurídica.

 

Dato

Apatzingán, Aguililla, Tumbiscatío, Arteaga, Los Reyes y Parácuaro son los municipios en los que se mueve Servando Martínez

 

Indagan a Pasalagua por crimen organizado

La Procuraduría General de la República (PGR) duplicó ayer el plazo de 48 horas para definir la situación del ex diputado y líder transportista michoacano José Trinidad Martínez Pasalagua, pues valora modificar su situación jurídica a la de probable responsable del delito de delincuencia organizada.

 

La ley permite ampliar a 96 horas el plazo para que una persona esté a disposición del Ministerio Público sólo en caso de crimen organizado. El líder transportista, permanecía hasta el cierre de esta edición en las instalaciones de la SEIDO.

 

Martínez Pasalagua fue retenido con una orden de presentación desde la tarde del martes pasado. La PGR lo indaga por presuntos vínculos con los caballeros Templarios, luego de que posiblemente participó en una reunión con líderes de ese grupo delictivo a la que también asistió el ex secretario de Gobierno Jesús Reyna, actualmente arraigado.

 

Ayer, Eduardo Quintero, abogado del líder transportista, señaló en varias entrevistas que el escenario más probable que advierte la defensa es que Martínez Pasalagua sea arraigado. Adelantó que una vez que eso suceda, solicitarán un amparo contra la medida cautelar y la incomunicación, recurso que además le dará acceso al expediente de la averiguación.