PRETORIA. La magistrada que juzga al atleta sudafricano, Oscar Pistorius, por el asesinato de su novia pospuso hasta mañana la declaración del acusado, después de que éste rompiera a llorar hoy mientras relataba cómo la encontró muerta.

 

La medida fue decretada a petición del abogado de la defensa, Barry Roux, ante la imposibilidad del corredor de seguir testificando.

 

Pistorius había explicado antes su versión de los hechos, según la cual disparó a su novia, Reeva Steenkamp, a través de la puerta del cuarto de baño de su domicilio tras escuchar un ruido en su interior y creer que se trataba de un intruso.

 

“Grité como nunca lo había hecho, pidiendo al Señor que me ayudara, llamando a Reeva”, dijo Pistorius, en alusión al momento en que el que supuestamente se percató de que la persona que había en el interior del baño era su novia.

 

Previamente, Pistorius recordó que se había despertado de madrugada para ir por un ventilador que había en la terraza y llevarlo al dormitorio.

 

Según su versión, un ruido provocado por Steenkamp en el baño le hizo pensar que un ladrón había entrado en la casa, por lo que tomó su arma de fuego y, caminando sin sus prótesis sobre los muñones, se desplazó hasta el aseo y abrió fuego en cuatro ocasiones.

 

“La primera cosa que pasó por la cabeza fue que tenía que coger el arma y proteger a Reeva”, dijo mientras sollozaba.

 

Tras tomar la pistola -con la que, según dijo, siempre duerme- del lado de la cama, Pistorius trató de alertar a gritos a su novia y al intruso por el pasillo que lleva al baño, aún sobre sus muñones.

 

El juicio a Pistorius -que volvió a vomitar hoy en los momentos más emotivos de su declaración- arrancó el pasado 3 de marzo en el Tribunal Superior de Pretoria.

 

Pistorius muestra a juez dificultades para caminar en sus muñones

 

En otro momento dramático de la vista, Pistorius, vestido con ropa deportiva, se quitó las prótesis y caminó sobre sus muñones para intentar mostrar al tribunal la vulnerabilidad y la falta de equilibrio que siente sin las dos piernas artificiales.

 

El atleta paralímpico, quien desde ayer declara como testigo en el juicio por el asesinato de la modelo Reeva Steenkamp, cambió hoy su habitual traje oscuro por un pantalón corto y una camiseta blanca deportivos, siguiendo instrucciones de su abogado.

 

Durante la vista, el corredor se acercó a la reconstrucción de la puerta que separaba el dormitorio del baño donde murió su novia en la casa del atleta en Pretoria, tanto con las prótesis puestas como utilizando sus muñones.

 

Pistorius exhibió ante la juez, Thokozile Masipa, su falta de equilibrio al caminar sin sus prótesis, prueba con la cual la defensa pretendía mostrar la altura del deportista respecto de la puerta del baño de su casa, a través de la cual tiroteó a Steenkamp el 14 de febrero del pasado año.

 

Tras la demostración, el velocista -que tiene las dos piernas amputadas desde que tenía once meses- regresó al estrado para explicar lo que pasó la noche del 14 de febrero, el día que asesinó a su novia.

 

El corredor se convirtió en Londres 2012 en el primer deportista de la historia con las dos piernas amputadas en competir en unos Juegos Olímpicos. Las prótesis de carbono que Pistorius utiliza para correr le han valido el sobrenombre de Blade Runner (“Corredor cuchilla”), en referencia a la conocida película de Ridley Scott.

 

El fiscal sostiene que Pistorius mató intencionadamente a Steenkamp, tras una supuesta discusión de la pareja, y pide para el acusado cadena perpetua.