EL CAIRO. Egipto anunció el martes el arresto del supremo líder de la Hermandad Musulmana, propinando un fuerte golpe al grupo islamista mientras se empeña en seguir con sus protestas callejeras contra la destitución del ex presidente Mohamed Morsi pese a la dura represión de las autoridades.

 

Mohamed Badie fue arrestado en un apartamento de Ciudad Naser, un distrito al oriente de El Cairo, cercano a donde estuvo por seis semanas un campamento en apoyo a Morsi, quien surgió del grupo islamista.

 

El campamento fue desalojado la semana pasada por las fuerzas de seguridad, junto con otro mitin de protesta en Guiza, en un operativo donde fallecieron cientos de personas.

 

El arresto de Badie es la más reciente medida de las autoridades contra la Hermandad, luego de haber detenido a cientos. Las protestas casi diarias del grupo islamista desde la salida de Morsi de alguna forma se extinguieron los últimos dos días, ya que se han registrado solo escasas manifestaciones en El Cairo y otras partes del país que atrajeron a cientos y algunas veces sólo a decenas.

 

El mismo Morsi ha estado detenido —no se sabe dónde— desde el golpe de Estado del 3 de julio, que fue ocasionado por días de protestas de millones de egipcios que se manifestaron contra el presidente y su gobierno. Morsi enfrenta acusaciones de planear junto con el grupo extremista palestino Hamas una fuga de prisión durante la sublevación en Egipto en 2011 y de ser cómplice de la tortura y asesinato de manifestantes afuera del palacio presidencial en diciembre, cuando todavía gobernaba.

 

La última aparición pública de Badie fue en un campamento pro Morsi el mes pasado, donde dio un apasionado discurso desde un escenario improvisado en el cual criticó el golpe de Estado que destituyó al ex presidente.

 

El arresto de Badie siguió a la muerte de uno de sus hijos, Ammar, quien falleció durante los violentos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y partidarios Morsi en El Cairo el viernes.