Tal como lo habían anunciado, maestros disidentes salieron a las calles de la capital del país. La ruta no fue la que habían anunciado un día antes, lo que no cambió fue su discurso en los últimos meses: rechazo absoluto a la reforma educativa y la defensa de la educación pública.

 

A reserva de las dificultades logísticas ante la falta de definición sobre la ruta a seguir por el contingente, la movilización se llevó sin contratiempos.

 

Las diferentes secciones sindicales adheridas a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y los grupos de apoyo conformaron un contingente que llegó a medir más de 2.5 kilómetros.

 

Según estimaciones de la Secretaría de Seguridad Pública del DF, participaron unas ocho mil personas en el recorrido que inició en las inmediaciones del Metro San Cosme y concluyó en el Zócalo.

 

A su paso frente al edificio de la Suprema Corte de Justicia, profesores consultados por este diario desestimaron los resultados del encuentro, un día antes, entre la CNTE y el Consejo Rector del Pacto por México: el avance en la lucha se dará cuando el gobierno tome en cuenta las propuestas de los maestros, advirtieron.

 

SIN INCIDENTES EN LOS ESTADOS

 

De acuerdo con Pedro Hernández, vocero de la sección 9 de la CNTE, hubo movilizaciones en al menos 14 ciudades del país, sumando cerca de 200 mil maestros.

 

En Chiapas se anunció un paro indefinido, mientras que en Coahuila las secciones del sindicato se adhirieron a la CNTE, mientras que en Baja California un grupo de profesores bloqueó por unas horas la garita de San Ysidro, California, la más transitada entre México y Estados Unidos.

 

La Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) advirtió que continuará con su lucha y que si el gobierno federal agrede al magisterio, éste lo cobrará con creces. En Michoacán, un estado con serios conflictos educativos, no se registraron movilizaciones.