Más de mil elementos de corporaciones federales y de los estados de Michoacán y Jalisco se han desplazado a lo largo de la franja limítrofe de ambas entidades en un intento de contener los hechos de violencia que ahí se registran.

 

El gobernador del estado, Fausto Vallejo Figueroa, afirmó que en municipios como Marcos Castellanos y Briseñas hay presencia del Ejercito Mexicano, Policía Federal y policía estatal, que mantiene coordinación con su similar de Jalisco.

 

Dijo que el objetivo principal es prevenir cualquier hecho delictivo que pudiera tener lugar en la zona.

 

“Hay más de mil elementos por allá en aquella zona en coordinación con las fuerzas de Jalisco; entonces, es muy claro que hay una BOM, establecida por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), está también la policía federal y las fuerzas de seguridad pública estatal, es clarísimo ver la presencia de estos grupos”, dijo.

 

Como se recordará, y a raíz de los enfrentamientos, secuestros, emboscadas, ataques contra autoridades y otros hechos de violencia registrados durante las últimas semanas en municipios como Marcos Castellanos, se declaró el toque de queda a partir de las 20:00 horas.

 

Además de que se han registrado renuncias masivas de elementos policiacos, quienes se sienten amenazados por el crimen organizado.

 

El propio gobernador del estado había mencionado en entrevistas anteriores que los hechos de violencia registrados en esta parte del estado respondían a la lucha entre grupos criminales que pretenden ingresar a la entidad.