NUEVA YORK. La prensa neoyorquina fulminó hoy al alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, por mantener la celebración del Maratón de Nueva York programada para el próximo domingo a pesar de la destrucción causada por el huracán “Sandy”.

 

Los periódicos de la ciudad, sobre todo los populares, consideran que los recursos destinados a la prueba podrían usarse para atender la difícil situación de los cientos de miles de neoyorquinos sin electricidad ni otros servicios entre el creciente frío que afecta a la zona.

 

El Maratón de Nueva York, la prueba de largo aliento más famosa del mundo, recorrerá como es tradicional los cinco barrios de la ciudad tras comenzar en Staten Island, gravemente azotado por la tormenta y en el que se han producido buena parte de la cuarentena de víctimas mortales que ha sufrido la Gran Manzana.

 

“Abuso de poder”, titula el tabloide New York Post, para referirse a los tres generadores de 800 kilovatios cada uno que se usarán para dar energía a la carpa de la prensa en el maratón, y que podrían ofrecer electricidad a un total de 400 viviendas.

 

Añade que también se ha desviado a los preparativos del maratón una docena de camiones de la policía que hasta ahora se usaban para ayudar a los habitantes de las zonas más devastadas por “Sandy”, como Queens y Staten Island.

 

El New York Times menciona que los organizadores y patrocinadores de la prueba van a donar unos 2.6 millones de dólares para los afectados, pero recalca la importante controversia generada y la oposición de vecinos o miembros de los servicios de emergencia.

 

Bloomberg y otros responsables municipales mantienen que la celebración de la prueba supondrá una inyección de moral y de dinero a la golpeada, un símbolo de la vuelta a la normalidad en esta ciudad de más de ocho millones de habitantes.

 

Los organizadores reconocen que esperan como mínimo un 15 % de corredores menos, unos 40 mil, ya que muchos de los que lleguen de fuera temen sufrir problemas para llegar y encontrar alojamiento.

 

Otros, sobre todo en la zona de Nueva York, se plantean cuestiones éticas: ¿es correcto correr un maratón al lado de tanta gente en apuros y necesitada?.

 

“Nueva York sigue siendo un desastre”, recuerda un columnista en el Wall Street Journal, quien se pregunta si “esta carrera sirve realmente los intereses de una ciudad dañada”.

 

Otra columnista de la publicación de internet The Daily Beast, dueña de la revista Newsweek, acusa a Bloomberg de dar prioridad a la clase blanca acomodada en lugar de “las necesidades básicas” de los trabajadores de la ciudad, cuyos barrios fueron los más afectados por el huracán.

 

El New York Daily News destaca las declaraciones del concejal James Oddo, líder de la oposición republicana en el ayuntamiento, quien considera “idiota” retirar a los agentes de policía de las zonas más afectadas para que den seguridad a las zonas recorridas por la prueba.

 

Cerca de medio millón de abonados neoyorquinos siguen hoy sin electricidad, pero para el domingo la mayoría habrán recuperado el servicio, según confía la empresa Con Edison.