La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación  (Sagarpa) aseguró que de los dos mil millones de pesos depositados desde abril pasado para impulsar los cultivos en las 15 entidades más afectadas por la sequía, los gobiernos de los estados sólo han ejercido 4%.

 

Frente a los señalamientos de gobiernos estatales y federaciones campesinas por la falta de los recursos comprometidos para abatir los efectos del estiaje, la dependencia señaló que a nivel estatal existen “burocracias”.

 

En conferencia de prensa, Antonio Berumen, oficial mayor de la Sagarpa precisó que únicamente Guerrero, Baja California Sur y Sonora ya ejercieron 80 millones de pesos de los dos mil millones de pesos depositados por la Federación, lo que equivale a 4% del total asignado.

 

“A nivel estatal hay otras burocracias que deben acelerarse a través de sus fideicomisos, que son flexibles y permiten priorizar el tema de la sequía en sus propios estados”, afirmó.

 

Sin embargo, los campesinos y los gobiernos estatales han acusado a la Federación de no bajar de manera inmediata los recursos para atender la sequía, cuyos daños ascienden a 12 mil millones de pesos.

 

Apenas hace dos semanas un grupo de campesinos amenazó con tirar la puerta del palacio de gobierno de Coahuila si no les entregaba la ayuda prometida desde diciembre.

 

Por su parte, los gobernadores de Durango, Chihuahua y San Luis Potosí han señalado que no fluyen los recursos federales hacia sus entidades. En el caso del primer estado, el gobierno asegura que sólo han recibido 3.9% del presupuesto total etiquetado para este año en el tema de sequía.

 

La Sagarpa indicó que a partir del decreto oficial de enero de este año, las dependencias deben entregar el dinero de forma inmediata. “Se ha insistido a la Secretaría de Hacienda para que agilice los trámites a nivel federal”, insistió Berumen.
En el evento, Ignacio Rivera, subsecretario de Desarrollo Rural de la Sagarpa, informó que se tienen 37 mil 500 millones de pesos para mitigar los efectos de la sequía hasta junio. De esos, ya se han ejercido 22 mil millones en los primeros cinco meses del año.

 

La expectativa de los funcionarios es optimista, tomando en cuenta los pronósticos meteorológicos de la época de lluvia. Aunque se prevén 21 huracanes, las lluvias estarán presentes en la mayor parte del territorio nacional.

 

Las zonas críticas seguirán siendo el norte y centro del país, específicamente Chihuahua, Nuevo León, Zacatecas y San Luis Potosí.

 

La dependencia prevé que la cosecha de maíz, frijol, sorgo, cebada, trigo, arroz, y cártamo será 6.3% más alta en el período otoño-invierno de este año, en comparación con el anterior. Incluso, la producción de maíz se elevará 32% en el mismo período.

 

Reubicación de cultivos da primeros resultados

 

Durante la cosecha otoño-invierno 2011-2012, los cultivos de maíz blanco que fueron reubicados hacia el sureste del país produjeron 1.6 millones de toneladas.

 

“Estamos viendo el potencial que tiene el sureste de nuestro país, donde no tenemos el problema de escasez de agua, ahora tenemos trabajo que hacer en la región para aprovecharlo”, aseguró Ignacio Rivera, subsecretario de Desarrollo Rural de Sagarpa.

 

En esa temporada se cultivaron 448 mil hectáreas. Sin embargo, el plan de la misma dependencia era trasladar 200 mil hectáreas de maíz, como parte del Programa Integral de Atención a la Sequía de la dependencia.

 

Éste se anunció después de que las heladas y la falta de lluvia provocaron la pérdida de las cosechas, sobre todo en Sinaloa que es el principal productor el grano. Los cultivos fueron trasladados a Campeche, Oaxaca, Chiapas y, en menor medida, a Tamaulipas.

 

Rivera explicó que se trabaja en esta zona, sobre todo en la temporada otoño-invierno, cuando no hay problemas de agua. Sin embargo, mantendrán su atención en los cultivos del norte durante primavera-verano, para seguir produciendo en la región.

 

Además de garantizar la producción, el traslado de cultivos permitirá cerrar la brecha de desigualdad que existe entre el norte y sur del país, así como mantener la disponibilidad de agua donde ahora escasea