MADRID. La organización terrorista ETA anunció ayer “el cese definitivo de su actividad armada”, cinco décadas después de su creación, en las que ha asesinado a casi 900 personas en busca de la independencia del País Vasco.

 

El anuncio, mediante un comunicado difundido en la edición digital del diario vasco “Gara”, se produce a un mes exacto de la celebración de las elecciones generales en España, el próximo 20 de noviembre.

 

La declaración llegó después de que seis personalidades internacionales, entre ellas el ex secretario general de la ONU Kofi Annan, y el líder del Sinn Fein, Gerry Adams, prepararan el terreno en una conferencia en San Sebastián, el pasado lunes, tras la que pidieron a ETA ese anuncio y que abriera un diálogo con los Gobiernos de España y Francia.

 

La banda hace en su texto “un llamamiento” a los gobiernos de ambos países “para abrir un proceso de diálogo directo” destinado a solucionar “las consecuencias del conflicto”.

 

El comunicado afirma que en “Euskal Herria (País Vasco) se está abriendo un nuevo tiempo político” y que se está “ante una oportunidad histórica para dar una solución justa y democrática” al conflicto.

 

El anuncio del cese de la violencia se produce también después de que los grupos políticos de tendencia independentista en el País Vasco lo hubieran pedido.

 

ETA, siglas de “Euskadi ta askatasuna” (“Patria Vasca y libertad”), fue fundada el 31 de julio de 1959 durante la dictadura de Francisco Franco.

 

Tras la muerte de Franco en 1975 y con la llegada de la democracia la banda armada no dejó ni aminoró la actividad terrorista y durante la Transición perpetró algunos de sus más sangrientos e indiscriminados atentados.

 

En sus 51 años de existencia asesinó a más de 850 personas y cometió decenas de secuestros y centenares de extorsiones a empresarios.

 

Su primera víctima se considera que fue la niña Begoña Urroz, fallecida en una explosión en San Sebastián el 27 de junio de 1960.

 

La última, el policía francés Jean-Serge Nerin, muerto en un tiroteo con miembros de la banda el 16 de marzo de 2010.

 

Desde hace más de dos años, ETA no comete atentados en España y había declarado un alto al fuego el pasado mes de enero acuciada, según las fuerzas de seguridad, por su extrema debilidad tras las sucesivas detenciones de sus cabecillas y la desarticulación de sus grupos armados en España y Francia, donde tenía cada vez más dificultades para ocultarse.

 

En la actualidad tiene más de setecientos de sus miembros en prisión. (EFE)