Quien se anotó un nuevo acierto fue el secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, toda vez que, en la actualidad, la percepción de inseguridad entre los capitalinos cayó 32%, en comparación a los datos que se tenían en 2018.

De igual manera, la confianza hacia la Policía de la ciudad se incrementó en 20 puntos porcentuales.

Al inicio de la actual administración local, la percepción de inseguridad alcanzaba 74%, es decir, nueve de cada diez capitalinos se sentía inseguros; sin embargo, cinco años después este índice alcanza 42 puntos porcentuales y, aunque aún no es una cifra para echar las campanas al vuelo, los avances en esta materia si son tangibles.

Este importante logro es producto de la Estrategia de Seguridad y Construcción de Paz implementada por la administración capitalina y que consta de cuatro ejes fundamentales:

Atención a las causas; más y mejores elementos policiacos; inteligencia e investigación y mayor coordinación.

Para el primer rubro, el Gobierno de la Ciudad ha realizado una importante inversión en programas sociales, así como en la construcción de infraestructura educativa, y en la recuperación de espacios públicos y recreativos.

En el segundo punto, se ha profesionalizado a más de 32 mil policías, a quienes también se les ha incrementado el salario en 45%, en comparación con el que percibían en 2018.

En el tercer rubro, se logró la integración de mil elementos a la Policía de Investigación y se creó la Fiscalía de Delitos de Alto Impacto, con lo que se logró desarticular a más de 170 células delictivas y la detención de 2 mil 370 presuntos delincuentes.

Y por último, y uno de los temas primordiales, es la coordinación entre autoridades capitalinas (SSC y FGJ) con las instituciones de seguridad del Gobierno federal y la ciudadanía.

No por nada, la Ciudad de México figura entre las entidades que gozan de un mejor clima de seguridad, junto con Yucatán y Querétaro.

¡Estrellita para el jefe de la Policía, Omar García Harfuch!

 

MARCELO Y SU ESTRATEGIA DE SALUD

Al igual que ocurrió con su Plan Ángel en materia de seguridad, ayer Marcelo Ebrard se volvió a colocar por encima de las demás corcholatas de Morena y presentó su estrategia de salud que está basada en cinco ejes rectores: cobertura universal, con lo que se pretende incluir a por lo menos 37 millones de mexicanos que, en la actualidad, no cuentan con ese servicio.

Prevención, detección y atención, para lo cual se destinarán más recursos para combatir enfermedades crónicas mediante nuevas clínicas.

Tecnología para una mejor atención, con tratamientos innovadores y uso de telemedicina, para llegar a donde no hay atención.

En cuanto a las vacunas y medicamentos, el objetivo es lograr la autosuficiencia mediante el aumento de la producción nacional a fin de evitar desabasto.

Y por último, atención prioritaria a quienes más lo necesitan como los adultos mayores, los menores de edad, quienes padecen de alguna enfermedad mental y las mujeres en edad reproductiva. El objetivo es que ningún niño se quede sin vacunar.

No es ningún modelo nórdico, pero sí uno muy realista, acorde a lo que nos urge en México.

 

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@JuanMDeAnda