La perdida de información del programa La Escuela es Nuestra de parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP) es una muestra más de los malos manejos que hizo su titular, Delfina Gómez, estando al frente de esa dependencia, aseveró la diputada federal, Teresa Castell de Oro (PAN).
La legisladora por el Estado de México puntualizó que además, y como si fuera poco, las políticas públicas y los programas están tan improvisados que han ocasionado una falta total de certidumbre.
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“Y ahora la SEP le traslada la responsabilidad a la Secretaría del Bienestar o incluso a sus propias plataformas, lo que es producto del caos interno que existe, con reglas a medias y proyectos sin estructura clara”, señaló la panista.
Apuntó que el que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) haya detectado que miles de escuelas recibieron recursos durante 2019 y 2020 sin ningún tipo de fiscalización da cuenta no solo de la total opacidad desde hace más de tres años en el manejo de esos fondos, sino que además es el resultado de que no haya expertos creando las mejores políticas educativas.
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“En lugar de eso tenemos un gobierno lleno de manipulación y contradicciones, deseaban acabar con la corrupción pero la multiplicaron con cada invento al que llaman programa”, sentenció De Oro.
Añadió que la opacidad de La Escuela es Nuestra se suma a otro proyecto improvisado como son las universidades Benito Juárez, de las que tampoco hay cifras exactas o de pruebas de dónde están los recursos.