Tadej Pogacar
Foto: AFP "No estoy enfadado", contestó el esloveno a un periodista en una rueda de prensa organizada por su equipo durante la segunda jornada de descanso  

El maillot amarillo del Tour de Francia, Tadej Pogacar aseguró que “entiende” las preguntas que pueden surgir por sus actuaciones en la Grande Boucle, donde domina con más de cinco minutos de ventaja sobre su primer perseguidor.

“No estoy enfadado”, contestó el esloveno a un periodista en una rueda de prensa organizada por su equipo durante la segunda jornada de descanso.

“Son preguntas incómodas puesto que la historia del ciclismo no ha sido de color de rosa, pero entiendo completamente por qué existen todas estas preguntas”, explicó Pogacar.

“No he preparado mis respuestas. Me encanta montar en bicicleta y poco importa lo que eso implica, yo lo acepto”, añadió el vigente campeón de la ronda francesa, quien siguió firme en su decisión de no publicar sus datos de rendimiento.

“Si compartes tus datos, puede influir en la táctica. Otros equipos pueden ver cuál es tu límite en ciertos terrenos”, justificó el esloveno.

Menos ofensivo durante la segunda semana de carrera, reconoció que pasó “a modo defensivo”.

“Corro día a día. Si tengo una oportunidad de sacar tiempo a mis rivales está bien. Basta un mal día para que cualquier etapa se vuelva complicada o decisiva”, cerró el esloveno, que tiene al colombiano Rigoberto Urán a cinco minutos y 18 segundos, al danés Jonas Vingegaard a 5:32 y al ecuatoriano Richard Carapaz a 5:33, antes de las seis últimas etapas.

Reto para los velocistas

“Los puertos son demasiado difíciles para los velocistas pero no lo suficiente para los líderes, que guardarán fuerzas sin duda para las dos grandes llegadas en alto de los dos días siguientes”, indicó el director de carrera Thierry Gouvenou en el día de descanso del Tour de Francia

LEG