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Foto: Especial Unos 500 concesionarios del transporte público y de carga marcharon en el centro de Nezahualcóyotl para exigir un freno a las extorsiones  

Unos 500 concesionarios del transporte público y de carga marcharon en el centro de Nezahualcóyotl para exigir un freno a las extorsiones, cobros indebidos y excesivos por arrastre grúas y tarifas en corralones concesionados.

Se concentraron en las inmediaciones del metro Peñón, y marcharon hacia la estatua del Coyote, en Pantitlán y López Mateos, donde exigieron la salida de Nezahualcóyotl, de los elementos de la policía de tránsito y de la estatal.

Carmen de la Rosas García y Epifanio López Garnica, integrantes de la Agrupación Política Nacional Unidos por un Mejor País acompañaron a los inconformes.

Se solidarizaron con la demanda y protesta de los trabajadores del volante.

Denunciaron que los abusos y corrupción de parte de corralones y policías de tránsito y de vialidad, ha llegado a límites que ya no pueden continuar.

“Los oficiales de tránsito actúan en contubernio con concesionarios de grúas y en ocasiones con Ministerio Público, que envían los vehículos a los corralones, donde por un sólo día de estancia de la unidad, les cobran hasta 5 mil pesos para poder recuperarla”, dijo de la Rosa García.

Por su parte, Ernesto García Tejeda, representante de la Unión de Concesionarios Colectivos Ruta 65, explicó que los policías estatales no tiene facultades para realizar labores de tránsito, pero aun así están a la caza de automovilistas a través de supuestos retenes, para bajo cualquier pretexto para extorsionar a los conductores.

Además, agregó: “Los cobros que fijan los encargados de los corralones son arbitrarios y cuando el conductor acude a recuperar su unidad, se encuentra con que ya ha sido desvalijada y nadie se hace responsable de ello, incluso, si la unidad permanece varios días, el concesionario prefiere perder la unidad al ser impagable el cobro”.

Aseguraron que Movilidad estatal no ha podido o querido meterlos en orden, por ello, dijeron, le hacen un llamado para que terminen estas arbitrariedades.

Dijo que son más de 7 mil conductores del transporte público, cientos más de carga y miles de particulares, que exigen la instalación de un corralón municipal en Nezahualcóyotl para que haya un mejor control y se terminen las extorsiones.

 

 

fahl