abuelito
Foto: Captura de video Los hechos ocurrieron en Florida, cuando un lagarto en un estanque en su patio trasero de la casa de Wilbanks, les dio una amarga sorpresa  

Es bien sabido que la lealtad de los perritos es para siempre, pero también, hay algunos dueños que han demostrado que se han ganado ese gran valor para su mascota.

Tal es el caso de Richard Wilbanks de 74 años, que salvó a su perrito de las feroces fauces de un cocodrilo.

Los hechos ocurrieron en Florida, cuando un lagarto en un estanque en su patio trasero de la casa de Wilbanks, les dio una amarga sorpresa.

Cámaras de seguridad puesta por una asociación entre la Federación de vida Silvestre de Florida y la Fundación fSTOP captaron cómo el can de meses estaba atorado en la mandíbula del joven cocodrilo.

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El hombre de la tercera edad al ver a su perro en peligro, corrió y se metió al estanque para sostener al cocodrilo; finalmente, logró abrir la mandíbula del animal y liberar a su cachorro.

Wilbanks indicó que “estábamos caminando por el estanque y salió del agua como un misil. Nunca pensé que un caimán pudiera ser tan rápido. Fue tan veloz”.

Además, detalló que como resultado de la adrenalina “automáticamente salté al agua, pero abrir las mandíbulas, fue extremadamente difícil”.

El abuelito reveló que sus manos fueron “mordidas”, sin embargo, acudió a un médico para que le brindara la atención necesaria y lo vacunara contra el tétanos.

Sobre Gunner, su perrito Cavalier King Charles spaniel sufrió una herida punzante en el abdomen, pero tras una ida al veterinario le fue “bien”.

Richard dijo que no quiere que sacrifiquen al cocodrilo o lo quiten, pues él y su esposa viven “en un paisaje compartido. No solo queremos tolerar la vida silvestre sino queremos prosperar con la vida silvestre en un paisaje compartido”.

Wilbanks aún saca a pasar a Gunner, pero ahora toma sus precauciones, pues le pon correa y pasean con tres metros de distancia del estanque.


Con información de CNN.