El Congreso chileno aprobó definitivamente este jueves la ley que permite a los ciudadanos el retiro parcial de sus pensiones y que será promulgada por el presidente Sebastián Piñera, pese a haber estado en contra de la iniciativa.

 

La medida habilita a sacar el 10% de los ahorros en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) para contrarrestar el impacto económico en las familias de la pandemia de coronavirus.

 

El cambio legal fue ideado por diputados opositores como mecanismo de ayuda económica a muchas familias afectadas por la merma en sus ingresos o desempleados a consecuencia de las restricciones impuestas ante la pandemia de coronavirus.

 

Aunque Piñera podía intentar bloquear la legislación, la presidencia informó en un posterior comunicado que el mandatario conservador firmaría el viernes la ley para su entrada en vigencia.

 

“La decisión del Presidente de promulgar esta Reforma Constitucional, obedece a su intención y voluntad -dada la difícil situación económica y social que viven muchas familias y compatriotas- de facilitar y agilizar el retiro de estos fondos de ahorros previsionales”, dijo.

 

El gobierno “está firmemente comprometido con avanzar en una Profunda Reforma Previsional que permita cambiar el sistema, con el propósito de mejorar las pensiones de todos los ciudadanos”, agregó.

 

Las AFP, creadas en la década de 1980 bajo la dictadura de Augusto Pinochet, manejan activos por más de 200.000 millones de dólares y han sido centro de protestas en los últimos años debido a las bajas pensiones.

 

En horas de la mañana, el mandatario había dicho que no sentía como una derrota la aprobación del proyecto, que finalmente logró respaldo de dos tercios de senadores y diputados.

 

Expertos sostenían que, debido a lo popular de la iniciativa, un intento de bloquearla podría aumentar el malestar de la población y revivir protestas sociales como las que impactaron al país desde octubre y hasta la llegada de la pandemia en marzo.

 

PAL