Foto: AFP El Pentágono, que llama a "todos los partidos a mostrar moderación", advirtió que "seguirá vigilando" las actividades militares chinas en la región  

El Pentágono denunció este jueves la realización de ejercicios militares chinos alrededor de un archipiélago disputado por varios países en el mar de China Meridional, asegurando que éstos empeorarán la situación en la región.

 

“El Departamento de Defensa está preocupado por la decisión de China de llevar a cabo ejercicios militares en torno a las islas Paracelso, en el mar de China Meridional, entre el 1 y el 5 de julio”, indicó el Pentágono en un comunicado.

 

Esas actividades “desestabilizarán aún más la situación” en esa zona disputada por Pekín, Vietnam y Taiwán.

 

“Esos ejercicios violan además los compromisos tomados por China en la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el mar de China Meridional de 2002”, recordó Washington.

 

En ese texto, firmado por los países de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés), los países se comprometían a evitar “actividades que pudieran complicar o agravar los desacuerdos y amenazar la paz y la seguridad”, indicó el ejército estadounidense.

 

Los ejercicios militares son “el último episodio de una larga serie de actuaciones de China para hacer valer reivindicaciones marítimas ilegales y perjudicar a sus vecinos asiáticos en el mar de China meridional”, añadió el Pentágono en su comunicado.

 

El Departamento de Defensa estadounidense afirmó que sólo quiere “una región indo-pacífica libre y abierta, donde todos los países, pequeños y grandes, sean seguros y soberanos, libres de toda violencia, y puedan desarrollar su economía de acuerdo con las reglas y las normas internacionales”.

 

El Pentágono, que llama a “todos los partidos a mostrar moderación”, advirtió que “seguirá vigilando” las actividades militares chinas en la región.

 

Las islas Paracelso están situadas frente a las costas de China y de Vietman que, junto a Taiwán, reclaman la soberanía de ese territorio.

 

El archipiélago lleva más de 40 años bajo el control de Pekín, que lo militarizó, instalando misiles ahí.

 

La Armada de Estados Unidos patrulla a menudo cerca del lugar y de las islas Spratly, más al sur, para garantizar la libertad de navegación en las aguas internacionales. Esas maniobras suscitan frecuentes protestas de China.

 

 

MGL