La vulnerabilidad que rodea a miles de sudamericanos (pobreza, marginación, su condición migrante o de refugiados) potencia su riesgo ante la amenaza que representa la pandemia por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que provoca la enfermedad Covid-19.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) resaltó la importancia de proteger a las personas más vulnerables de la región, por ejemplo, las poblaciones indígenas de la cuenca amazónica (más de 2 mil 400 territorios en ocho países).

“Viven en aldeas aisladas con acceso mínimo a servicios sanitarios o en ciudades densamente pobladas, como Manaos (Brasil), Iquitos (Perú) o Leticia (Colombia)”, detalló Carissa Etienne, directora de la OPS, y agregó que los contagios en la cuenca ya ascienden a 20 mil.

“La repercusión tiende a ser el doble de alta”, calculó, “en comparación con otros estados”.
Los indígenas sufren enfermedades endémicas sumadas a la diabetes, que los colocan dentro del grupo de mayor riesgo sanitario.

Brasil es la segunda nación más afectada por el virus en América, con 241 mil casos y 15 mil muertes, seguida de Perú, Canadá y México.

Después, Chile, Ecuador y Colombia tienen el peor panorama en el Cono Sur.

Infografía: Xavier Rodríguez

La agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) fue un paso más lejos, al alertar incluso de la extinción de comunidades indígenas enteras a causa del virus.

La movilidad de los grupos por la región los sitúa en calidad de refugiados, sin acceso a servicios suficientes. En Brasil viven casi 5 mil indígenas venezolanos Warao; y en Colombia, grupos binacionales, como los wayuu y bari viven cerca de Venezuela.

Otros grupos en riesgo son los afrodescendientes, refugiados, personas encarceladas y mujeres.
Etienne remarcó que se debe comprender el acceso a la salud como un derecho universal.

 

CON INFORMACIÓN DE AGENCIAS

 

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