Foto Especial Los desechos fueron intercambiados por alimentos de las cosechas de agricultores de Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco  

El Ecotianguis UAM-X 2019 de la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), organizado a través del Programa Universidad Sustentable, recopiló 8.8 toneladas de residuos que los tres mil 500 participantes pudieron intercambiar por alimentos proporcionados por productores de diversas alcaldías del sur de la Ciudad de México.

Como parte de la actividad, realizada en el estacionamiento central de esa sede académica, fueron instalados puestos para recibir desechos sólidos a cambio de los cuales se entregaron eco-billetes de diferentes denominaciones, con los que obtuvieron bienes de las cosechas de agricultores de Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco.

La jornada compiló 5,842 piezas de aparatos eléctricos y electrónicos; 397 kilogramos de PET, 109 kilogramos de HDPE (Polietileno de alta densidad), que normalmente se utiliza en envases de leche, detergente y aceite para motor; 155 kilogramos de latas de aluminio; 86 kilogramos de latas de fierro, y 8,144 kilogramos de papel, incluidas revistas, archivos muerto y blanco, y cartón, que fueron canjeados por una tonelada de productos agrícolas.

El rector de la Unidad, Fernando De León González, consideró muy significativa la participación de productores rurales del sur de la Ciudad de México, y agradeció la presencia de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (CORENADER), que en esta gestión de gobierno ha vinculado de mejor manera la conservación rural de sus suelos con la producción sustentable de alimentos y otros productos necesarios para la subsistencia.

La recolección de residuos se gestiona en principio para forjar un aprendizaje sobre la preservación ecológica y todo lo que ello conlleva, y como una contribución de la Institución al reciclaje adecuado, evitando así que se dispongan en sitios de transferencia o rellenos sanitarios, lo que mitiga las emisiones al medioambiente que afectan la calidad productiva de los suelos y de los mantos acuíferos, además de la salud en los seres humanos, animales y plantas.

Los residuos fueron entregados limpios y clasificados como PET, cartón, revistas, papel de oficina, folder, libros, periódicos o latas de aluminio, así como laptops, PC de escritorio completas, discos duros, decodificadores de señal, telefonía celular, equipos de audio y video y electrodomésticos.

Entre los productos intercambiados por residuos hubo jitomate, lechugas, espinacas, acelga, chile, verdolagas, zanahorias, rábanos, quelites, nopal, pepino, pimiento, flor de cempasúchil, huevos, miel, fresas. También destacaron los puestos en los que se ofrecía a la venta productos elaborados con materiales orgánicos o reciclables, incluidos jabones, cremas faciales, cosméticos, popotes, cubiertos y platos desechables, entre otros.

 

 agv