Un automovilista británico gastó el equivalente a 722 mil pesos mexicanos (30 mil libras esterlinas) de sus ahorros en una fallida batalla legal por una multa de tránsito de unos 2 mil 400 pesos, con el fin de “obtener justicia”.

 

Richard Keedwell, de 71 años, señaló que el sistema legal “seriamente deficiente” le costó cerca de tres años de batalla legal en la que utilizó los ahorros que tenía destinados para la herencia de sus hijos.

 

El automovilista afirma que fue arbitrariamente multado por conducir a 56 kilómetros por hora en una zona con límite de velocidad de 48 kilómetros por hora, en la ciudad de Worcester.

 

Multa a Richard Keedwell
Imagen de la multa a Richard Keedwell que causó el juicio fallido del automovilista británico.

 

Las autoridades del Servicio de Persecución de la Corona (CPS) afirmaron que en este caso se añadieron una “variedad de temas” que contribuyeron con el alargamiento del juicio.

 

El ingeniero retirado negó haber conducido a más de 48 kilómetros por hora, en el incidente ocurrido en noviembre de 2016.

 

Afirmó a medios británicos: “Estoy muy sorprendido de que un par de días después recibí la multa. No podía creer que haya rebasado el límite de velocidad. Hice una vuelta cotidiana bastante lenta, de hecho”, dijo el afectado a la BBC.

 

Keedwell afirmó que no se molestó en contestar y prefirió contratar a un experto en electrónica y cámaras de video, que testificó ente una corte que la cámara pudo haber sido activada por un automóvil que circulaba en un carril adyacente.

 

Los magistrados realizaron cuatro diligencias antes de que la apelación fuera admitida. Tras haber perdido el caso, también perdió una apelación el pasado mes de agosto.

 

El ciudadano afirmó que había esperado que el caso se solventara bastante rápido, pero que tuvo que gastar la mayor parte del dinero en honorarios de abogados (506 mil pesos), costos del juicio (169 mil pesos) y gastos de transporte.

 

Dijo sentirse cansado y culpable de que su familia no contará con el dinero gastado en el juicio. “Lamento la cantidad de dinero. Simplemente quería justicia”..