En el futbol mundial era necesario que la tecnología llegara para ayudara los árbitros por varios motivos, pero sobretodo la velocidad del juego los rebasó y la televisión los expuso muchas veces al ridículo por sus errores que los aficionados en casa con siete repeticiones apreciaban y criticaban.

Así pues, se estudio la forma, se planeo la mejor manera de utilizar la tecnología para que realmente ayudara a los árbitros sin quitarles su importancia y su protagonismo. De hecho, los encargados del proyecto observaron y preguntaron en otros deportes como lo aplicaban.

Una cosa les quedó clara: por mucha tecnología, en el fútbol americano, la polémica y los errores no se perdieron. Continúan, pero en un grado menor.

Así con bombo y platillo llegó el VAR al fútbol, como su nombre lo dice, asistente del árbitro.

Pero lamentablemente, este gran recurso no se ha convertido en el mejor amigo de este, por el contrario, pareciera que es un problema para el juez central por un problema de protagonismo o bien de falta de personalidad, lo cierto es que más que amigos parecen enemigos.

El problema no es sólo en México, es mundial. Esta semana en Veracruz fue una pachanga cuando una misma jugada fue revisada en dos oportunidades. En Italia le anularon un gol a Cristiano Ronaldo y la Juventus por milímetros, y nadie aún sabe si realmente estaba adelantado.

En España las críticas y los ataques al VAR son una constante y en Inglaterra donde debutó este torneo, nadie entiende por qué al Manchester United no le revisaron un penal muy claro, pero el árbitro central no quiso ni ver el monitor.

Regresando a nuestro país, el VAR ya se dice que es el gran ayudante de tal o cual equipo. Los ex árbitros comentaristas de TV critican, se contradicen y en algunos casos felicitan.

Pero en mi opinión creo que el problema está en algo primordial que nunca se ha logrado con el arbitraje que es la unificación de criterios. Si se pita diferente en México que en Sudamérica, y es muy diferente en Europa, como queremos que se pongan de acuerdo en utilizar el VAR.

Nos dijeron: “el VAR se utilizara sólo en jugadas de errores manifiestos y en momentos muy especificos como goles y penales”. Pues bien, nadie se pone de acuerdo cuando es error manifestó o no, cuando se debe revisar o no, porque cada árbitro, cada comisión, cada aficionado o comentarista tiene su propio criterio.

Hay partidos donde el VAR sí ayudó al árbitro y sí ayudo al fútbol, pero en otros, la confusión de los centrales y los del camión de videos es tal que terminan en errores muy criticables. ¿Y saben por qué?. Simple, tienen diferentes criterios en una misma jugada.

Pero hay un detalle muy grave: la continuidad del juego se está perdiendo, las pausas son enormes y perjudican al partido. Ahora después del gol, hay que dividir los festejos. Jugadores y aficionados ya tienen que esperar para gritar completos sus anotaciones.

Con mucha calidad, el buen amigo Paco Villa, incluso ya aprendió a narrar dos veces el mismo gol.

El VAR va a mejorar, pero hoy en día no es el mejor amigo del árbitro y sumen que las reglas se modifican y crean más desconcierto.

Sino unifican criterios, esto seguirá lleno de críticas.