La contienda por la dirigencia de Morena ya comenzó, aunque oficialmente será entre octubre y noviembre.

Y aunque en un inicio salieron varios candidatos, algunos se han quedado rezagados y otros se fortalecen.

Quienes conocen el proceso ven a Bertha Luján, la actual presidenta del Consejo Nacional de Morena, como la carta más fuerte.

Aunque hay otros jugadores con mucha presencia como el diputado Mario Delgado que se han colocado entre los favoritos, a pesar de que ha insistido en que esperará los tiempos para definirse.

El proceso de elección se tiene contemplado con un padrón cerrado de aproximadamente tres millones de votos, y quien conoce esa estructura es precisamente Luján, ya que ha estado presente desde que se conformó Morena como partido, y como una de las dirigentes, ha trabajado en la conformación de la estructura de ese partido.

Yeidckol Polevnsky también pretendía jugar, pero se ha quedado en el camino. Apenas la semana pasada, Bertha Luján le dio una muestra de su músculo, cuando el Consejo Nacional, el cual encabeza, destituyó al representante de Morena ante el INE, Carlos Suárez Garza.

¿Qué tiene de importante esta destitución? Que es padre de Carlos Humberto Suárez Flores, quien se desempeñó como directivo de British American Tobacco y jefe de Shirley Almaguer Camacho, nada más y nada menos que hija de Polevnsky.

Luján ha trabajado muy de cerca del presidente López Obrador, por lo que no fue extraño ver a su hija, Luisa María Alcalde, como la protagonista de uno de los videos del movimiento que se convirtió posteriormente en partido político y al llegar a la Presidencia, como secretaria del Trabajo.

De ahí que se considere a Bertha Luján como la aspirante a presidir el partido, que lleva la ventaja.

Los otros candidatos buscan alianzas, pero, al parecer, la elección con un padrón cerrado favorece a Luján.

El verdadero reto vendrá después de la votación, cuando el padrón se abra para crecer y una parte importante de los simpatizantes quieran entrar al partido. Ahí es donde los jugadores mostrarán de qué están hechos.

Por ejemplo, a partir de ese momento, René Bejarano estaría a punto de convertirse en uno de los hombres más poderosos al interior de Morena. El profesor ha recorrido durante años parte del territorio nacional para fortalecer y crear una estructura sólida a través de su Movimiento Nacional por la Esperanza, al tiempo que Dolores Padierna tejía y afianzaba alianzas políticas. Después de la lucha por la presidencia de Morena, el peso de su estructura será muy importante.

#¿LoboEstásAhí?

Y en el otro lado, el proceso de elección de presidente avanza en el PRI. El miércoles debaten los candidatos. La restitución de los derechos a Lorena Piñón, expulsada por haber participado en una elección del PAN, no tiene mayor impacto. La disputa es entre dos: el ex gobernador de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, quien ya fue respaldado por la mayoría de los gobernadores, menos por Claudia Pavlovich, quien juega con su mentor, Manlio Fabio Beltrones, y quien ya anunció que no participará en el proceso. Ivonne Ortega tiene una desventaja: el candidato del grupo que la apoya era el ex rector José Narro Robles, no ella.