El ex guerrillero Jesús Santrich traicionó al movimiento, y ya nadie en Colombia parece respaldarlo.

El partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) marcó distancia del ex líder, cuyo nombre de nacimiento es Seuxis Pausias Hernández Solarte, pues sus acciones traicionaron al instituto político y al acuerdo firmado con el Gobierno.

“Tiene responsabilidades políticas muy serias con todos los que confiamos en él. Nos decepciona y lastima profundamente”, difundió la antigua guerrilla.

Su caso fue turnado a la Comisión Ética de FARC, y algunos miembros del colectivo se han pronunciado a favor de su expulsión.
Apenas el miércoles, la Corte Suprema de Justicia de Colombia emitió una orden de captura en su contra (el martes debía comparecer y no se presentó) y pidió a la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) una circular roja para su detención.

El ex líder rebelde ocupa un escaño en el Congreso por el partido FARC desde hace apenas unos días, pero al mismo tiempo es investigado por el presunto envío de 10 toneladas de cocaína a Estados Unidos, que habría cometido después de la entrada en vigencia del acuerdo de paz entre la guerrilla y el Gobierno, en diciembre de 2016.

Desapareció el 30 de junio, tras abandonar a sus escoltas en una zona de capacitación y reincorporación para excombatientes, cerca de la frontera con Venezuela, en lo que ha sido considerado por el gobierno como una burla al acuerdo de paz.

El presidente de Colombia, Iván Duque, advirtió ayer que Santrich podría estar oculto en Venezuela, y amenazó con denunciar internacionalmente a “cualquier país que le brinde protección”.

Frase

“¿Puede estar en Venezuela? Esa probabilidad es real. Ningún país puede darle protección, si lo hace lo vamos a denunciar, nadie se burla de los colombianos”
Iván Duque
Presidente de Colombia

 

Con información de agencias

LEG