Foto: Reuters Mientras los separatistas han atacado y secuestrado a decenas de personas, incluidos jóvenes estudiantes, al tiempo que lanzan amenazas e intensifican su llamado a la secesión  

La población en la región anglófona de Camerún es la más afectada al ubicarse en el medio de la campaña de las fuerzas armadas contra los separatistas y la respuesta de éstos con ataques, sumando unos 170 muertos entre 220 incidentes en los últimos seis meses, denunció Human Right Watch (HRW).

 

En un reporte, dado a conocer este jueves, la Organización No Gubernamental (Ong) acusó a ambas partes de la intensificación de la violencia y de cometer abusos desde octubre pasado en el noroeste y suroeste de Camerún, en el África central.

 

Las tropas cameruneses han usado la fuerza de manera indiscriminada en su campaña a gran escala, durante la cual han saqueado, incendiado o destruido viviendas y propiedades privadas, y causado decenas de víctimas mortales entre los civiles.

 

Mientras los separatistas han atacado y secuestrado a decenas de personas, incluidos jóvenes estudiantes, al tiempo que lanzan amenazas e intensifican su llamado a la secesión.

 

HRW señaló que con base en entrevistas a la población -entre víctimas, familiares y testigos- de diciembre pasado a este mes de marzo, la cifra de muertos se ubica en 170 en unos 220 incidentes de violencia, aunque la cifra pudiera ser superior ante la imposibilidad de llegar a las áreas más remotas.

 

La Ong demandó al gobierno del presidente Paul Biya, en el poder desde 1982, a investigar los abusos de los derechos humanos cometidos durante la campaña de sus fuerzas del orden y garantizar la seguridad de la población.

 

El director para África central de HRW, Lewis Mudge, recordó a las autoridades su obligación a proteger a la población, sobre todo en tiempos de violencia.

 

A los líderes separatistas envió un mensaje similar a fin de que sus combatientes y seguidores detengan todo tipo de abuso contra los civiles.

 

La violencia en la región anglófona de Camérun detonó a finales de 2017, cuando el gobierno reprimió protestas a favor de mayor autonomía, causando la proliferación de los separatistas armados. También desde ese entonces medio millón de personas tuvieron que desplazarse a otras zonas del país.

 

El 1 de octubre de ese año manifestantes y activistas autoproclamaron la independencia de Ambazonia, donde Chao Ayaba, el comandante de Fuerzas de Ambazonia, uno de los principales grupos armados, es el jefe ejecutivo desde entonces, desconocido al gobierno central de Camerún.

 

Organizadas por profesores y estudiantes, las protestas iniciaron de forma pacífica desde un año antes por la marginación por parte del gobierno, y pedían el uso más igualitario del inglés en tribunales y centros educativos, en un país donde el 80% de la población es francófona.

 

jhs