Foto: Cuartoscuro / Archivo El Convenio General considera lo siguiente: 93 plazas de nueva creación; 29 plazas de programas suprimidos; 41 plazas de cambio de perfil; 84 plazas en proceso o cubiertas; lo que hace un total de 247 plazas  

A 43 días de la huelga en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), después de 11 reuniones plenarias, previas al estallamiento de la huelga el pasado primero de febrero, y 11 mesas de negociación después de estallada la huelga, la Universidad ratifica su plena disposición a mantener el diálogo y desarrollar acuerdos, sin comprometer la viabilidad financiera presente y futura de la Institución.

“Desde el estallido de la huelga, la Universidad ha insistido en que con las puertas abiertas será viable mejorar, con el concierto de toda la comunidad, el funcionamiento institucional, así como decidir el rumbo de una de las mejores instituciones de educación superior de México.

A través de un comunicado, la UAM señaló que entregó una propuesta de Convenio General con las distintas temáticas por las que el Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM (SITUAM) emplazó a huelga, así como proyectos de acuerdo para mejorar el salario de los trabajadores de base para continuar con los trabajos del nuevo manual de puestos administrativos de base, las condiciones en que se otorgan las prestaciones y la definición de los mecanismos para la elaboración del proyecto de plan complementario de jubilación.

En lo relativo a las propuestas de plazas de personal administrativo, el Convenio General considera lo siguiente: 93 plazas de nueva creación; 29 plazas de programas suprimidos; 41 plazas de cambio de perfil; 84 plazas en proceso o cubiertas; lo que hace un total de 247 plazas.

“Cada día que la Universidad permanece cerrada deja de cumplir con su compromiso social; interrumpe la formación de más 58 mil alumnos de licenciatura y posgrado; posterga la realización del proceso de nuevo ingreso; afecta a los estudiantes que efectúan estancias de movilidad nacional e internacional; interrumpe las investigaciones en curso; cancela los compromisos con otras universidades e instituciones; suspende los procesos de acreditación y reacreditación de programas, y deja de participar en los debates dentro y fuera del país”, concluye el documento.

 

MGL