Foto: Reuters / Archivo No se puede hablar de salud bucal, si se tienen problemas que producen dolor, dificultad para hablar o comunicarse, así como incapacidad para gesticular, reír y comer  

La mala alimentación, el tabaquismo, el consumo nocivo de alcohol y la falta de higiene bucodental, son factores de riesgo de enfermedades bucodentales, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) aunque existen también diversos determinantes sociales.

 

 

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de Medio Camino 2016, (ENSANUT), señala que, 86% de los mexicanos recibe atención bucal en las unidades del Sistema Nacional de Salud, el resto se atiende en la práctica privada o en instituciones de asistencia social.

 

 

En el Día Nacional del Odontólogo, la Secretaría de Salud, indicó que la boca y los órganos dentarios juegan un rol fundamental en la salud de los individuos, pues realizan funciones vitales como la alimentación, la respiración, el habla, la fonación y la recepción del sabor de los alimentos.

 

 

Conservar una buena salud bucal permite a la persona desenvolverse de una mejor manera, y también le ayuda a tener una mejor confianza en sí misma, mejorando la autoestima.

 

 

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, dijo la atención odontológica es de suma importancia para la salud integral del ser humano y de la comunidad, pero no se considera una prioridad.

 

 

No se puede hablar de salud bucal, si se tienen problemas que producen dolor, dificultad para hablar o comunicarse, así como incapacidad para gesticular, reír y comer.

 

 

Por su parte, Asa Cristina Laurell, subsecretaria de Integración y Desarrollo del Sector Salud, destacó la importancia del trabajo de los dentistas en la docencia, la investigación y, sobre todo, la práctica institucional, primordial para mejorar la salud de la población.

 

 

 

jhs