De repente Elba Esther Gordillo entró en reposo.
¿Por qué?
No le han dado el pandero para dirigir la procesión.
Primero a los antecedentes:
La alianza político-electoral con Andrés Manuel López Obrador tuvo condiciones y todas ellas se cumplieron con creces antes de iniciar.
El tabasqueño le dio la ansiada libertad con el argumento legal de su edad –más de 70 años- todavía en tiempos de Enrique Peña Nieto.
Fue declarada inocente y el entonces procurador general de la República, a cargo de Alberto Elías Beltrán en sustitución de Raúl Cervantes, no impugnó.
Le fueron restituidos todos sus derechos ciudadanos, y gracias a ellos pudo hacer campaña –como mensajeros su yerno Fernando González, el ex dirigente magisterial Rafael Ochoa Guzmán y su nieto René Fujiwara– por el de Macuspana.
Era la libertad absoluta y empezó a reorganizar su imperio con tres instrumentos básicos: el magisterio sindicalizado, el magisterio rebelde y un partido político propio.
Fue joya en la victoria del Gobierno actual, pero…
El impresentable Bejarano
No le ha sido fácil.
Iniciado su gobierno, Andrés Manuel López Obrador ha establecido sus propias reglas y el magisterio, del sindical o coordinado, lo mismo da, no le ha respondido como quería.
No ha podido siquiera poner un incondicional absoluto al frente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) porque hay muchas ambiciones.
A la renuncia de Juan Díaz de la Torre fue puesto Alfonso Cepeda en su lugar con dos actitudes decisivas:
Ha reorganizado al gremio, establecido nexos con el Gobierno –a su disposición, señor Presidente- y ya tiene comunicación con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Está ausente del conflicto en Michoacán, pero ése es un asunto desatendido por la Federación mientras se desgasta intencionalmente la figura del gobernador Silvano Aureoles.
En esas condiciones, para satisfacción del Gobierno y en concreto del secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, se le considera adecuado para seguir al frente.
Ante tal situación, aparece René Bejarano -¿alguien duda de su cercanía con López Obrador?- para descalificar a Elba Esther Gordillo en una clara advertencia.
-No te muevas –se decía en la vieja estructura disciplinaria priista (Luis Echeverría, José López Portillo, Carlos Salinas) tan añorada por el actual Gobierno.
Allá ella si capta el mensaje.
Y en el CNTE la lucha sigue
1. Mientras se decide la suerte de Elba Esther Gordillo en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, muchos buscan relevar a Alfonso Cepeda.
Todos se dicen cercanos a Elba Esther Gordillo.
Algunos nombres: María Sanjuana Cerda, Moisés Jiménez, Rafael Ochoa Guzmán, Juana Alicia Espinoza…
Dado el ambiente actual, deberán ellos y muchos más esperar la terminación del período de Cepeda.
2. La voz crítica en el aniversario de la Constitución provino del gobernador anfitrión, el panista Francisco Domínguez Servién.
Defendió el federalismo, condenó el centralismo de decenios porque permitió acaparar poder en perjuicio de estados y municipios.
Y puso cara a López Obrador cuando dijo que es una falta de respeto pedir una nueva Constitución cuando se conmemora la de 1917 y no se cumple como es obligación de todos, gobernantes y gobernados.
fahl