La inversión será el detonador del salario mínimo durante el próximo sexenio, por lo que es necesario ofrecer garantías y certidumbres para que las empresas sigan invirtiendo, señaló el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

En su documento semanal, el organismo que depende del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) indicó que el nuevo Gobierno deberá centrar sus esfuerzos en el estímulo de la inversión productiva para incrementar el acervo capital y con la posibilidad de ampliar las fuentes de trabajo con mejores condiciones.

“Las condiciones laborales siguen reflejando una importante precarización del mercado laboral, indicó.

Refirió que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), realizada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), la población ocupada total aumentó en 5.2 millones de personas en el último año y, de ellos, el universo con ingresos de hasta dos salarios mínimos creció en seis millones.

Mientras que los ocupados con ingresos superiores a dos salarios mínimos se redujo en casi tres millones de personas, lo que muestra la precariedad de las nuevas contrataciones.

Asimismo, insistió en que la precarización del mercado laboral se hace más evidente al observar que se incrementó en 2.7 millones de personas el número de personas que labora más de 48 horas semanas y ganan hasta dos salarios minios, cuando el sexenio pasado creciera en sólo 510 mil.
Es así que aseguró que es necesario mejorar las condiciones laborales a través de empleos mejor pagados, lo que contribuye en mayor medida a reducir los niveles de pobreza de las familias mexicanas.

EPN deja a México estable

Por separado, el presidente del CCE, Juan Pablo Castañón, consideró que el presidente Enrique Peña Nieto deja al país estable en materia económica, a pesar del entorno económico global actual.

Al hacer un balance de cara al 1 de diciembre, el empresario estimó que este sexenio deja un legado importante por preservar como las reformas estructurales que, en conjunto, marcaron cambios positivos para la economía de México.

La apertura del mercado energético y una mayor competencia en sectores estratégicos, como el de telecomunicaciones, dieron paso para incrementar la competitividad y el dinamismo de esos rubros, apuntó.

A decir del dirigente empresarial, a lo largo de la administración se mantuvo una inflación promedio estable y siempre se procuró tener un balance fiscal responsable, lo que permitió acumular 35 trimestres continuos de crecimiento económico.

Castañón dijo que México también reafirmó su apuesta hacia un modelo de apertura económica, al haber apostado a renovar y modernizar sus acuerdos comerciales con el mundo.

LEG