Pachuca.- La rehabilitación de una refinería, la construcción de vagones del Tren Maya, la conclusión de la carretera de la huasteca y la invitación al AMLO Fest volumen II fueron los compromisos que Andrés Manuel López Obrador, Presidente electo, dejó a los hidalguenses durante el mitin que realizó como parte de su gira de agradecimiento.

De acuerdo con el morenista, habrá una inversión de 10 mil millones de pesos, en los dos próximos años, para rehabilitar la refinería de Tula, la cual está dentro de las seis que perfila recuperar para mejorar la producción petrolera y que, entre todas, tendrán una inversión de 50 mil millones de pesos.
“Y no descartamos que en el mediano plazo se construya la nueva refinería de Tula, como se contempló en un inicio”, agregó en el mitin.

Guiño a Bombardier

Por otra parte, adelantó que ya tiene a la empresa para uno de sus proyectos más ambiciosos: el Tren Maya.

“El ferrocarril, los vagones queremos que se construyan en Ciudad Sahagún, Hidalgo; ya lo tengo probado, cuando fui jefe de Gobierno en la Ciudad de México se compraron 40 trenes con 400 vagones para el Metro, y se dio el contrato a Bombardier (…). Esa empresa cumplió, se dio trabajo y quedó el beneficio en el país, es lo mismo que vamos a hacer en este caso”.

Luego de los anuncios, extendió la invitación para que lo acompañen a la toma de protesta el 1 de diciembre, pues además del acto protocolario del Congreso de la Unión, realizará una especie de AMLO Fest, como se denominó a su cierre de campaña, pero en volumen II, en el Zócalo capitalino.

“No soy cacique”

Ayer, el Presidente electo tuvo que hacer una pausa en su discurso, pues resonó la consigna “¡Fuera Fayad, fuera Fayad”, en rechazo al gobernador hidalguense.

Y es que al morenista le calentaron al público, pues el maestro de ceremonias, en aras de encender los ánimos aseguró que López Obrador le fue a “jalar las orejas” al gobernador hidalguense, pues previamente sostuvieron una reunión privada.

Aquella expresión no gustó al equipo del Presidente electo, pues el morenista ha levantado la bandera de unidad con los Gobiernos estatales, así que personal de logística tuvo que bajarle el micrófono al locutor e indicar que suavizara el discurso.

Ya en el acto, el Presidente electo escuchó el rechazo al hidalguense, pero no les siguió la corriente.

“Yo no vengo eso porque yo no soy un dictador, yo no destituyó a nadie, es el pueblo el que destituye a los gobernantes. Estamos construyendo una auténtica democracia, no una dictadura, yo no soy cacique que quede claro”.

LEG