Cuando en diciembre del año pasado, Andrés Manuel López Obrador dio a conocer al gabinete que lo acompañará durante su gobierno, en caso de ganar las elecciones el 1 de julio, y mencionó a Carlos Manuel Urzúa Macías como el hombre que estaría al frente de la Secretaría de Hacienda, provocó que varios analistas y especialistas económicos levantaran la ceja, pues al doctor por la Universidad de Wisconsin-Madison no se le conoce experiencia profesional en la materia, más que cuando fue titular de las finanzas del Distrito Federal de 2000 a 2003.

Y aunque hace un par de semanas dio a conocer algunas de las políticas de un eventual gobierno lopezobradorista, el doctor Urzúa no generó la confianza que se esperaba entre la comunidad financiera nacional e internacional; de ahí el nerviosismo que ha provocado cierta inestabilidad en el tipo de cambio, aunado a otros factores como la incertidumbre en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y la inseguridad que impera en nuestro país.

Ante esta situación, fuentes cercanas al primer círculo de Morena nos dicen que existen grandes posibilidades de que López Obrador cambie de parecer y decida reemplazar al doctor Urzúa como su candidato a dirigir las finanzas nacionales, para lo cual suena el nombre de un economista experimentado y que, además, goza de una gran credibilidad y confianza, tanto a nivel nacional como internacional.

Se trata nada más y nada menos que del doctor Santiago Levy Algazi, quien, desde 2008 y hasta la fecha, se desempeña como vicepresidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), pero que además ha ocupado diversos cargos en la administración pública nacional, desde subsecretario de Ingresos de Hacienda, hasta la titularidad del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

De acuerdo a nuestra fuente, Andrés Manuel López Obrador ya tuvo varios acercamientos con el doctor Levy para convencerlo, y en cuestión de días se podría dar a conocer este fichaje, que daría un respiro a los empresarios y ciudadanos que exigen una estricta responsabilidad en el manejo de las finanzas nacionales, en caso de un eventual triunfo del candidato de la coalición Juntos Haremos Historia.

PARAR LA DIVISIÓN ENTRE MEXICANOS
Aún estamos a tiempo de poner un alto a la polarización que se está generando en este proceso electoral, sobre todo en la contienda por la Presidencia de la República. Y es que, un día sí y otro también, las redes sociales se inundan de insultos y agresiones entre usuarios que simpatizan con uno u otro proyecto político. Hoy, el discurso de odio está más presente que nunca, y es alimentado por gente sin escrúpulos que busca a como dé lugar el triunfo del candidato con el que simpatizan o para el cual trabajan, sin importarles la división que están generando entre los mexicanos.

Hay que poner el debate, la discusión y la crítica (siempre y cuando se haga con respeto, argumentos y propuestas); por encima de las descalificaciones, el insulto y la injuria. No hay que olvidar que las agresiones verbales se pueden tornar muy fácilmente en violencia física, y eso ni México ni los mexicanos nos lo merecemos.
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@JuanMDeAda