MADRID.- Víctimas de terrorismo lamentaron que se permita la disolución de la organización separatista Patria Vasca y Libertad (ETA), mientras que autoridades españolas descartaron impunidad.
La presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Consuelo Ordóñez, cuestionaron ayer que el gobierno español permita que ETA protagonice su propia disolución en un acto con representantes políticos.
En un acto en San Sebastián, norte de España, en que se presentó el manifiesto “ETA quiere poner el contador a cero”, Ordóñez criticó al gobierno cuando aún quedan crímenes por resolver.
El manifiesto exige a ETA contribuya a esclarecer los 358 asesinatos que no tienen sentencia judicial (otros informes oficiales los cifra en 349) y que es apoyado por miles de ciudadanos.
Ordóñez también criticó que la disolución de ETA se realice el próximo viernes en un acto en el suroeste de Francia, al que asistirán representantes políticos españoles y franceses.
Por otra parte, el ministro español del Interior, Juan Ignacio Zoido, pidió a ETA que colabore con los crímenes que cometió y quedan pendientes de resolver por la justicia.
En declaraciones realizadas en Marrakech, Marruecos, donde participa en una conferencia Euro-Africana, explicó que ante el anuncio de ETA de disolución, “ya las fuerzas de seguridad y el Estado de derecho la habían derrotado”.
“Lo que tienen que hacer aquellos que todavía quedan en la banda terrorista ETA es poner fin a su situación, pero colaborando y ayudando a que todos esos crímenes que quedan por esclarecer sean esclarecidos de forma total y absoluta”, afirmó.
Las declaraciones de Zoido se dieron ayer, luego de que se hiciera pública una carta de ETA enviada a agentes políticos y organizaciones sociales, en la que asegura que ya procedió a disolver todas sus estructuras.
En la misiva fechada el 16 de abril, hecha pública ayer, la banda transmite su decisión de “dar por terminados su ciclo histórico y su función, dando fin a su recorrido”, después de un debate interno.
La carta se difundió a dos días que en un acto en el suroeste de Francia representantes de organizaciones confirmen el final de la organización, que se conocerá en un video que se difundirá desde este jueves.
La banda terrorista nació a finales de los años cincuenta del siglo pasado y su primer crimen reconocido fue el asesinato de un guardia civil en 1968.
Desde entonces, y hasta octubre de 2011 cuando anunció el cese de la actividad armada, mató a más de 850 personas, el 40 % de ellas civiles.
Además de los asesinatos, ETA utilizó el secuestro como arma para conseguir dinero y aterrorizar a la población, así como la extorsión a empresarios vascos.
JNO