El diseño, construcción y lanzamiento de un microsatélite mexicano que tomaría imágenes del territorio nacional desde el espacio puede concretarse.
Para ello, un grupo de especialistas de la UNAM, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Agencia Espacial Mexicana (AEM) acordaron hacer una convocatoria encaminada a financiar y realizar el proyecto.
Y es que México gasta cuatro mil millones de dólares al año en comprar imágenes y servicios satelitales, según José Francisco Valdés Galicia, coordinador del Programa Espacial Universitario (PEU).
El equipo, que se construiría en el país, contaría con apoyo del Centro de Investigación Ames de la NASA (con sede en Moffett Field, California), que participaría con asesoría, laboratorios de prueba y con el lanzamiento al espacio, afirmó Valdés.
Durante la Jornada UNAM–NASA, expertos se reunieron en la sede del PEU, en Ciudad Universitaria, para presentar diversos proyectos de investigación en el área, y acordaron tareas previas a fin de concretar el plan de la convocatoria.
El satélite tomaría imágenes de México desde el espacio, útiles para cuestiones agrícolas, de exploración de selvas y bosques, y para estudios del crecimiento de ciudades, entre otras aplicaciones económicas, sociales y ambientales.
“Queremos usarlo en proyectos que utilizan las imágenes satelitales, las cuales tenemos que adquirir”, precisó Valdés.
El grupo de académicos pretende paliar ese gasto del sector, de cuatro mil millones de dólares al año, “porque eso no nos retribuye, no tenemos transferencia tecnológica, no hay capacitación de personas y somos simplemente usuarios de tecnologías hechas en otros países”, señaló el coordinador del PEU e investigador del Instituto de Geofísica. Hoy en día, en el mundo ha cambiado el paradigma de los satélites, añadió.
“Podemos hacer satélites pequeños, de 10x10x10 o de 30x10x10, que no cuestan mucho; se llaman CubeSat o microsatélites de cubo. Los estamos diseñando en México, tanto en la UNAM como en el IPN, pero necesitamos el financiamiento para acabar de construirlos, probarlos y lanzarlos”, subrayó.
El diseño y los estudios preliminares para el microsatélite mexicano podrían realizarse a lo largo de 2018.
JNO