Nati no es tan ruidosa como otros perros, es que sus 17 años ya le pesan, permanece pasiva, acurrucada en los brazos de su dueña Yaiza, quien perdió su departamento en el sismo del 19 de septiembre pasado. La joven relató que su mascota se escondió debajo de la mesa de la cocina y eso fue lo que hizo que Nati fuera una de las 111 mascotas rescatadas de los edificios colapsados.

 

Ayer,  la Asamblea Legislativa del DF (ALDF) reconoció la labor de los canes que participaron en las labores de rescate de personas, y realizó un homenaje a los perros que pudieron salir con vida del desastre.

 

Durante el evento, Sandra Hernández, titular de la Agencia de Atención Animal local, quien recientemente asumió este puesto, comentó que con los rescates queda por sentado la importancia de respetar todas las vidas y agradeció la labor de los perros entrenados para estas labores, algunos de ellos, presentes para la entrega de los reconocimientos.

 

Por su parte, el diputado local Víctor Hugo Romo mencionó que la protección de los animales es algo que el Gobierno debe impulsar como una política de Estado. Recordó que con el temblor, médicos veterinarios trabajan de manera incansable, sin alguna retribución económica, para salvar a las mascotas halladas entre escombros.

 

Además, en cuanto se indicaba sobre la necesidad de tener desparasitantes, comida, pipetas, comida y demás equipo de atención veterinaria, clínicas móviles, acudieron al llamado estudiantes de distintas universidades, clínicas privadas y albergues que dotaron de insumos.

 

Sobre la Agencia de Atención Animal, comentó que ésta es una integración de esfuerzos en la que se demuestra que sociedad y Gobierno pueden ir juntos en beneficio de los más desamparados.

 

Xavier López Adame, diputado del PVEM, mencionó que los reconocimientos son un tributo a los binomios caninos, cuya participación fue esencial para la localización y rescate de vidas humanas.

 

Manuel Granados, titular de la Consejería Jurídica de la CDMX, mencionó que los logros no hubieran sido posible sin el entrenamiento, la disciplina y el gran corazón de los binomios rescatistas.

 

 

 

*edición impresa 24 Horas

 

caem