Ha pasado un mes desde que se hizo pública y oficial la convocatoria lanzada por el PRD y el PAN para la construcción de un frente común opositor para 2018, y no se ha registrado ningún avance.

 

A lo más que han respondido los partidos invitados por Alejandra Barrales y Ricardo Anaya es que el asunto les interesa, pero que tendrá que ser consultado con sus respectivos consejos o comisiones internas.

 

Nueva Alianza y Movimiento Ciudadano realizarán en agosto sus reuniones para conocer si se suman o no al frente, cuya principal premisa es “primero el programa y después el candidato’’.

 

Hasta el Verde Ecologista decidió que sí le interesa el asunto, nomás que a los convocantes sigue sin convencerle el interés mostrado por el partido del tucán, pues no saben si es real o es simplemente una maniobra para encarecer su amor al PRI.

 

Morena es el único partido que ya bateó la convocatoria; de plano dijo que con el PRD ni a la esquina, así que sólo falta conocer a los que realmente dejarán sus intereses personales para crear el frente que plante sacar al PRI de Los Pinos en 2018.

 

No será fácil.

 

 

Muy horondo se vio al gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, el viernes pasado durante la ceremonia de graduación de los cadetes de la Heroica Escuela Naval Militar, en Antón Lizardo.

 

Yunes igual platicaba con el presidente Peña que con algunos de los secretarios invitados al evento, Aurelio Nuño y José Narro, a pesar de que el índice de violencia en la entidad se ha disparado y la creación de empleos se ha desplomado.

 

Pero eso no parece importar al veracruzano, quien ha hecho de la causa penal en contra de Javier Duarte de Ochoa su cruzada personal y su principal acción de gobierno.

 

Eso no le basta a la población del estado que nomás no la ve llegar.

 

 

Por cierto, en el mismo evento, presidido por Peña, se vio en público, por primera vez en meses, al director general del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, Eugenio Ímaz Gispert, muy recuperado de salud, acompañando a los secretarios de Marina, Vidal Francisco Soberón, anfitrión de la ceremonia, y de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos.

 

La reaparición de Ímaz es, sin duda, una buena noticia.

 

 

En las redes sociales está a todo lo que da la guerra por la candidatura de Morena a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.

 

Lo interesante del asunto es que los internautas han decidido que sólo son dos quienes realmente compiten por dicho puesto: el delegado en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, y la delegada en Tlalpan, Claudia Sheinbaum; cualquier otro nombre es meramente un agregado cultural.

 

De por sí esta guerra está en su apogeo, seguramente se intensificará luego de la encuesta publicada por un periódico capitalino que perfila a Morena como seguro ganador, independientemente de quién sea el candidato o contra quién deba competir.

 

Nomás hay que recordarle a los emocionados que la encuesta es una fotografía de un momento y que generalmente, al menos desde 2012, los sondeos a la mexicana resultan fotos muy movidas.

 

Pero de que se va a poner bueno, ni hablar.

 

caem