El ministerio de defensa de Rusia culpó a grupos rebeldes sirios del ataque químico que dejó unas 70 personas muertas, al asegurar que el armamento prohibido era almacenado por los civiles.

 

Rusia reconoció que aviones del régimen sirio atacaron la ciudad rebelde de Khan Sheikhoun en el norte de Siria.

 

Sin embargo, el ministerio señaló que los aviones atacaron un depósito de sustancias letales que supuestamente pretendían ser usadas en Irak.

 

Estados Unidos sostiene que aviones de Siria al mando del presidente Bashar al-Assad arrojaron las armas químicas.