En un encuentro con la Asociación Nacional de Alguaciles en Washington, Donald Trump sostuvo que en Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito, con sede en San Francisco, que estudia la petición del Gobierno de restituir el veto su migratorio se están discutiendo cosas “que nada tienen que ver” con su medida.

 

 

“No quiero llamar a una corte sesgada, así que no la llamaré sesgada (…). Pero los tribunales parecen ser muy políticos”, sostuvo a defender sus primeros pasos como Presidente.

 

 

 

Si esos tres jueces, dos nominados por presidentes demócratas y otro por un republicano, “quisieran, en mi opinión, ayudar a la corte en términos de respeto por la corte, que hagan lo que deberían estar haciendo”, advirtió.

 

 

Y “lo correcto”, según el mandatario, es que esa corte restaure su veto, ordenado el pasado 27 de enero para suspender temporalmente el programa de acogida de refugiados de EU y anular la emisión de visados para ciudadanos de siete países de mayoría musulmana: Libia, Sudán, Somalia, Siria, Irak, Irán y Yemen.

 

 

 

A juicio de Trump, incluso hasta “un mal estudiante de secundaria” puede entender la legalidad de su medida.

 

 

 

“He aprendido mucho en las últimas dos semanas y el terrorismo es una amenaza mucho mayor de lo que la gente de nuestro país cree”, señaló Trump.

 

 

 

Tras escuchar este martes los argumentos del Gobierno y de los estados de Washington y Minesota, impulsores del recurso que ha motivado la suspensión temporal del veto, los jueces del tribunal de apelaciones aseguraron que tomarán una decisión sobre si restituirlo o no “lo antes posible”, sin especificar fechas concretas.

 
Batalla a los cárteles

 
“Es hora de evitar que las drogas inunden nuestro país, y por cierto, lo haremos. Ustedes tienen ese poder. Ustedes conocen a los (inmigrantes) ilegales, ustedes los conocen por sus nombres, ustedes los conocen por sus apodos”

 
Donald Trump
Presidente de EU

 

 

 

Republicanos silencian a senadora demócrata

 

 
En el pleno del Senado Elizabeth Warren comenzó un apasionado discurso en contra del nominado de Donald Trump a Fiscal General del Estado, Jeff Sessions, en el que citó textualmente una dura crítica al senador que escribió la viuda del activista Martin Luther King Jr., Coretta Scott King, cuando Sessions fue nominado a un puesto de juez federal en 1986.

 

 
En aquel entonces, Scott King le envió una carta al Senado oponiéndose al nombramiento de Sessions, alegando que él había usado “el asombroso poder de su oficina (como fiscal en Alabama) para congelar el ejercicio libre del voto” de ciudadanos negros. Ese año el Senado rechazó el nombramiento de Sessions como juez federal. Mientras Warren citaba la carta de Scott King en el pleno del Senado, fue interrumpida por el líder republicano de esa cámara, Mitch McConnell.

 

 
En ese momento, el presidente de la mesa advirtió a Warren de que había violado la regla de funcionamiento del Senado que prohíbe atacar personalmente a otro legislador.

 
Warren intentó continuar su discurso, atónita ante la acción de McConnell: “Me sorprende que las palabras de Coretta Scott King no sean aptas para el debate en el Senado de Estados Unidos”, dijo. McConnell repitió su objeción a que Warren continuara hablando. El presidente de la mesa le dio la razón: “La senadora debe regresar a su asiento”.

 
La senadora  quedo vetada en las sesiones para elegir al nuevo Fiscal General que se esperaban concluyeran ayer.