Tras lo ocurrido en días pasados con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y su juicio político que la Cámara de Diputados le abrió, podría traer incertidumbre en la realización de los Juegos Olímpicos de Río 2016.

 

El Comité Olímpico Internacional (COI), asegura, no cree que el tema político de aquel país afecte a la realización del evento, “entraron en una fase muy operativa en la que este tipo de asuntos políticos influyen mucho menos que en otras etapas de la organización de los Juegos Olímpicos” comentó un portavoz del COI.

 

No hay un hecho precedente de que la presidenta en curso no haya estado en la inauguración, pues se presume que de hacerse válido el juicio político, Dilma seria removida de su cargo y el Vicepresidente de Brasil, Michel Temer, seria quien tomara el cargo de Rousseff y el encargo de inaugurar la fiesta deportiva.

 

Los principales problemas que podrían ocasionarle a los Juegos un percance, son los asuntos políticos, la vida en las favelas; el Estadio Maracaná está muy cerca de uno de estos vecindarios. Así mismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha declarado una epidemia mundial por el tema del virus del Zika, lo cual también puede afectar seriamente a Río 2016.

 

A pesar de los problemas en la región de Río de Janeiro, la mayoría de los hoteles están reservados casi en su totalidad y lo positivo, no han sufrido cancelaciones hasta el momento.

 

El Secretario de Turismo, Antonio Pedro Viegas, indicó que esperan a más de un millón de turistas de todo el mundo para presenciar la justa veraniega, aunque paralelamente apenas llevan vendido el 55 por ciento de los boletos para todos los eventos. Preocupante si se toma en cuenta que faltan poco más de tres meses para la apertura.

 

Por si fuera poco, el desempleo le está pegando duro al país sudamericano y es que el desempleo aumentó un 40.1%, lo cual deja a 10.3 millones de personas sin una forma de ganarse la vida.

 

Al final, el tiempo será el mejor juez y dará su veredicto sobre la edición XXXI de los Olímpicos de Verano.

 

El Zika, otro enemigo de los Juegos

 

El virus del Zika, en los últimos meses ha creado una gran preocupación para los protagonistas de Brasil 2016, aunado a la alerta de epidemia que mandó la OMS.

 

Aunque algunos de los países participantes, ya mandaron recomendaciones, pues varios de los deportes son en aguas abiertas, y temen a que la picadura del mosquito afecte a sus competidores.

 

Potencias mundiales como Estados Unidos, han propuesto a sus atletas el considerar no participar por este virus. Kenia y España ya consideran no mandar a sus atletas a Río.

 

Para combatirlo, Brasil sacó una aplicación para teléfonos inteligentes donde podrán encontrar información acerca del virus y sus recomendaciones. La app incluye datos de hospitales y GPS para acudir a zonas de emergencia.

 

Hay antecedentes de conflictos

 

La historia de los Juegos Olímpicos no siempre fue color blanco, también tiene su lado oscuro.

 

En 1968, un mes antes de la inauguración de los Juegos, el dos de octubre, una masacre de estudiantes, sacudió a la ciudad de México. El presidente en aquel año era Gustavo Díaz Ordaz, que se lavó las manos el día de la inauguración comentando “aquí nada pasó”.

 

En 1972, cuatro años después, un atentado terrorista fue ocurrido mientras los Juegos se celebraban, once miembros de la delegación Israelí fueron secuestrados y asesinados por miembros de Septiembre Negro al tener un rescate fallido.

 

Ahora en Brasil 2016, el juicio político contra Rousseff ha encadenado cientos de disturbios esperando a que la destituyan de su cargo, poniendo un alto a la corrupción de aquel país.

 

Antorcha